A muchas madres les puede pasar que crean que sus bebes no son tan bonitos como los demás pero es cuestión de paciencia y amor, de aceptación y de enseñar a sus hijos lo mucho que valen sin discriminación. 
Para toda madre su hijo es lo más maravillosos y bello del mundo pero a veces desafortunadamente la mente juega malas pasadas y la influencia social puede hacer que los propios hijos no se vean tan agraciados, entonces empiezan a sentirse culpables porque creen que sus hijos no son tan bellos como los de sus amigas o las mujeres que pasan en la calle. Obviamente el problema puede ser más grande cuando las personas que lo ven no le dicen que es muy lindo o hacen caras de ternura cuando lo ven, simplemente dicen que es gracioso y no más, entonces se sienten mal como si las cosas hubieran estado más hechas o los genes de los padres no son tan “perfectos” como los demás.
Para los demás también es complejo poder expresarse y que el otro no se sienta mal y además que simplemente es un bebe y n sabe ni lo que se dice de él, entonces se limitan a decir que otro bebe es más bonito pero no quiere decir que él no tenga lo suyo. Pero hay que tener en cuenta que el color del pelo, de los ojos, de la piel y de los rasos influye y aunque no se vean como niños de revista, no son feos, solamente que tienen sus propias características que afortunadamente los hacen diferente a los demás. Incluso no quiere decir que los bebes sean exactos a como son de uno o dos años a cómo serán en el futuro cuando sean adolescentes o adultos, pues con el tiempo todo cambia y pueden verse totalmente diferentes.Lo bueno de estos bebes que no son considerados tan bellos es que son mucho as extrovertidos, que se las ingenian para poder ser el centro de atracción así no sea por su belleza, sino por su gracia, por sus bromas o su carácter divertido.
También son mucho más sociables, hablan más , sonríen e interactúan con otros pequeños o con los adultos, casi no lloran y son un poco más independientes, mientras que los” bonitos” son más tímidos, se esconden detrás de sus padres, se demoran en sociabilizar por pena y lloran por cualquier motivo, obviamente no todos pero si la mayoría. De todas maneras no es un problema grave, pues a muchas mamás les pasa pero con el paso del tiempo pueden superar esta inseguridad y lo importante e son hacer sentir mal al bebé, enseñándoles desde pequeños que la sociedad no los acepta porque son feos, ya que simplemente no lo son. Es cuestión de amor y aceptación, de respeto y comunicación.
