Los niños deben conocer de todo cuando están pequeños, sobre todo lo que los ayude a ir desarrollando su cultura general, su inteligencia y por ende forme parte de su educación.
La importancia de los museos parece estar disminuyendo en la época en la que todo es accesible en Internet. Además del hecho de que sus hijos pueden aprender datos y acceder a más información, hay muchas otras razones por las que debe llevar a sus hijos al museo. He aquí por qué.
1. Para tener una referencia visual
Sus hijos pueden estudiar la historia, la geografía y las ciencias en la escuela, pero eso no necesariamente significa que su comprensión conceptual y fundamental en todos estos temas es claro como el cristal. Al visitar los museos, los niños pueden obtener una comprensión visual y contextual de los académicos, si se trata de entender los efectos indirectos de la evolución o por qué las tapas de los glaciares se están derritiendo.
2. Para poner las cosas en una perspectiva de tiempo
Los niños pueden confundirse acerca de las líneas de tiempo de varios eventos del mundo, ya sea político, histórico o de naturaleza militar. Los museos se conoce el uso de tablas, gráficos, presentaciones de diapositivas y varios otros recursos para poner los acontecimientos del mundo en una perspectiva de tiempo. Esto ayudará a que sus hijos reciban una perspectiva más amplia de los acontecimientos que han dado forma al mundo.
3. Para tener una idea de las cosas que ellos nunca serán capaces de ver en sus vidas
Ya se trate de una moneda histórica, un fósil de dinosaurio, un cuerno antiguo o restos de una planta extinguida, los museos son avenidas perfecto que puede dar a los niños una sensación del mundo que no pueden experimentar en sus propias vidas. Se puede tener una idea de cómo era el mundo de un centenar de años atrás sólo por visitar museos y mirando a piezas históricas.
4. Para disparar la imaginación y fomentar la curiosidad
Sus niños podrían empezar a pensar en cómo trabajar los aviones al ver una réplica del avión que fue volado por Amelia Earhart, que podría empezar a preguntarse acerca de la historia persa con mirar una alfombra antigua o podrían quedar hipnotizado por aprender acerca de la infancia de Einstein. Después de tener a sus hijos al museo, no se sorprenda si su hijo colas a la Internet para buscar información sobre algo único e interesante. Los niños tienen que estar expuestos al mundo real para ayudarles a ampliar sus horizontes y disparar su imaginación.
5. Para hacer más amigos y relacionarse con más gente
Los niños pueden pasar un buen rato en el museo si se visita en grupos grandes de amigos o familiares. Cuando visita a un museo se convierte en una actividad social, puede transformar la experiencia de los niños. Inclinándose sobre una réplica determinada con amigos, charlar sobre lo que les gustaba y disgustaba y molestando a los demás con preguntas convertir la visita de sus hijos a partir de un museo aburrido para un apasionante. También pueden llegar a interactuar con guías del museo o los niños de otras escuelas y hacer nuevos amigos.