Relajarse de una manera natural. Parte II

Cuando sufrimos estrés debido a situaciones complicadas que pueden surgirnos a lo largo de nuestra vida, es indispensable poner todos los medios necesarios para combatirlo cuanto antes y que no consiga afectar a nuestra salud de una manera negativa. Una buena alimentación es una de las principales bases para mantenerlo a raya. Relajarse de una manera natural. Parte II

Cuidado con los carbohidratos

El estrés provoca en nuestro organismo un aumento de adrenalina que lleva a que nuestro metabolismo funcione mucho más rápido con un consiguiente mayor consumo de proteínas, grasa y carbohidratos. Nuestro cerebro detectará este consumo, por lo que requeriremos una mayor ingesta de dichos nutrientes.

Normalmente cuando una persona se encuentra más nerviosa de lo habitual, suele experimentar un mayor deseo de comer o de beber, sobre todo algo dulce. En este momento los hidratos de carbono pueden desempeñar un gran papel para controlar el estrés y es más, existen pruebas de que consumir este tipo de alimentos ayuda a alimentar a nuestro cerebro a la vez que reducen el nivel del estrés. El trigo, el arroz, la pasta, las legumbres, las frutas como las ciruelas, manzanas, melocotones o peras y las hortalizas como las patatas, espinacas, zanahorias o cebollas son algunos de los alimentos que contienen esos carbohidratos,. Aunque es imprescindible evitar los carbohidratos simples como los productos refinados o los azúcares, ya que estos en un primer momento consiguen calmar la ansiedad procedente del cerebro pero después incitan al cuerpo a un deseo incontrolable de seguir comiendo, contribuimos a un elevado consumo de calorías que puede desembocar en un sobrepeso.

Alimentos que mejoran el funcionamiento del organismo

Existen una serie de alimentos que ayudan a mejorar el funcionamiento de nuestro organismo como las frutas y verduras sobre todo aquellas que aportan vitamina C como el tomate, el pomelo y la naranja y vitamina A, como la espinaca, el brócoli o la zanahoria y que constituyen ambas un importante protector contra el estrés ya que refuerzan nuestro sistema inmunológico. El plátano es otro alimento que por su alto contenido en potasio contribuye a relajar el sistema neuromuscular y resulta perfecto para aliviar el estrés y calmar la ansiedad gracias a su alta riqueza en hidratos de carbono. Los frutos secos aportan energía  por lo que también resultan ideales para relajar el organismo de igual manera que el pescado que es muy saludable para mantener el organismo en relajación y el corazón en perfecto estado.

El estrés llega a generar daños en los tejidos por lo que es imprescindible beber agua para hidratarse de una manera natural. Se ha comprobado que el chocolate consigue disminuir los niveles de hormonas responsables de aumentar la sensación de estrés en una persona, además de mejorar su estado de ánimo. En cualquier caso es necesario moderar su consumo porque si se consume en elevadas cantidades pueden incitar a una mayor ingesta con el consiguiente aumento del peso y de azúcar en la sangre. También se recomienda el consumo de carne, especialmente las que no contengan grasas puesto que el estrés agota las reservas de proteínas, sustancia con las que cuenta este tipo de alimentos.