Refrigerios para la escuela

Cómo preparar alimentos saludables para llevar a la escuela Refrigerios para la escuela La comida que los niños llevan a la escuela puede ser la causa por la cual algunos de ellos puedan presentar dolor de estómago, diarrea fiebre y vómitos. El motivo es la contaminación por bacterias. Las bacterias que causan enfermedad alimenticia se reproducen con facilidad a temperatura ambiente.

Preparar una comida para conservar sin inconvenientes a temperatura ambiente y ser comida horas más tarde requiere cuidados extras ya que algunos alimentos necesitan mantenerse fríos y otros calientes

Estos son alimentos perecederos tales como diferentes carnes, aves, huevos y productos lácteos (incluyendo el yogurt).
Lo más importante para una comida sana, es mantener fríos los alimentos fríos y caliente los alimentos calientes cuidando su perfecta limpieza.

Porque se contaminan
* Para reproducirse, las bacterias que causan enfermedad alimentaria necesitan temperatura, y humedad adecuadas. Los alimentos húmedos que contienen proteínas son especialmente susceptibles al crecimiento bacteriológico.
* La manipulación del alimento con las manos o con utensilios sucios durante la preparación tiene más riesgo de propagar gérmenes a los alimentos.
* Es decir que puede haber más riesgo de contaminación con ensaladas, jamón, pollo o huevo.
* Si elige fiambres para preparar sándwiches observe las fechas de vencimiento con mucho cuidado. Estos productos pueden contener bacterias frenadas a temperaturas de refrigeración que se multiplican al perder el frío.

Conservación
* Es mejor guardar las comidas en una heladera para mantenerlos fríos, pero esto a veces no es posible.
* Las viandas o recipientes para alimentos, especialmente las más modernas mantienen los alimentos más fríos que una bolsa de papel.
* Enfriadores comerciales, un envase lleno de hielo o un refresco congelado ayudan a mantener frío el contenido del recipiente.
* Aconséjeles a los niños guardar su comida en el lugar más fresco que puedan, nunca en una ventana al sol o en la mochila.
* Para mantener los alimentos calientes por varias horas, use un termo diseñado para mantener alimentos a esa temperatura.
* Caliente el alimento lo más que se pueda antes de verterlo al termo.
* El alimento todavía debería estar caliente al tacto en el momento de comer.
* Adviértales a sus hijos a tener cuidados ante los riesgos de quemaduras.
* Lave bien el termo después de cada uso y enjuáguelo por dentro con agua hervida antes de usarlo de nuevo.
* Trate de proveerles recipientes adecuados a la edad de los niños y que si se rompen no produzcan lesiones.

Limpieza
* Mantenga todo limpio mientras prepara las comidas para evitar la diseminación de gérmenes. Asegúrese que sus manos, los utensilios, las mesadas y/o los lugares donde prepare los alimentos estén limpios.
* Lave los envases para alimentos incluyendo el termo después de cada uso. Envuelva alimentos en envolturas limpias.
* Si elige bolsas use las diseñadas para este fin. Las bolsas usadas de las compras pueden estar contaminadas por insectos, bacterias y/ o derrames de otros alimentos u otros productos tóxicos como por ejemplo de limpieza o insecticidas.

Preferencia
* Los alimentos que no necesitan permanecer fríos ni calientes pueden ser deseables para estas comidas.
* Algunas opciones incluyen carne, aves bien cocidas, frutas frescas y/o secas, vegetales, panes, cereales y nueces o almendras.
* Algunos alimentos empaquetados «listos para comer» en porciones individuales como fruta enlatada y budines pueden complementar estas comidas.

Consejos a la hora de preparar el refrigerio escolar
* Lavar bien las manos y utensilios
* Mantenga todo limpio al preparar y guardar la comida.
* Planee un menú balanceado con alimentos saludables que han sido preparados debidamente.
* Asegúrese que las carnes hayan sido cocinadas completamente.
* Mantenga fríos los alimentos fríos y caliente los alimentos calientes.
* No permita que estos alimentos reposen a temperatura ambiente por más de dos horas
* No use sobras perecederas, échelas a la basura. No consuma sobras que hayan reposado en el refrigerador por mucho tiempo.