Lucir siempre bellas es una meta y fijación que tenemos todas las mujeres, luego de dar a luz queda esa preocupación, pero no te preocupes que existen formas de recuperar tu figura sin excederse en ejercicios durante los días que amamantas a tu bebé. 
Luego de tener a lo que se convertirá en la razón de tu vida, en la luz de tus ojos y en lo más importante para ti; es decir, tu bebé, te toca cuidar ese cuerpo que durante nueve meses sufrió cambios debido al embarazo.
Siempre que las mujeres dan a luz, una de las cosas que quieren hacer es recuperar su figura y bajar esos kilos o libras demás que ganaron con el embarazo. Pero ¿cómo bajar de peso mientras das pecho? ¡No te preocupes! Que si existen diferentes formas para mantenerte en forma y no tener que hacer dietas rigurosas que puedan afectar la lactancia de tu bebé.
Si bien es cierto que tener a un bebé te cambia la vida, también cambia tu cuerpo y ya no cuentas con el mismo tiempo disponible de antes para darle un poco de cariño a tu cuerpo. Por ello, lo primero que debes hacer es mentalizarte en que debes cambiar tu estilo de vida, para que así todo lo que venga se te haga más fácil.
Tips para lucir bien luego de dar a luz
1. No olvidarse del ejercicio: Aunque sabemos que no puedes empezar el entrenamiento en un gimnasio y que debes esperar a que el doctor te de la autorización para comenzar a ejercitarte, puedes comenzar con las caminatas por la casa y las áreas verdes de tu casa.
Ya luego de transcurrida aproximadamente las cuatro u ocho semanas reglamentarias para comenzar a ejercitarte, no debes empezar con tanto entrenamiento físico, lo que quiere decir que aún no puedes volver al gimnasio, pero puedes:
– Salir a caminar con tu bebé por la calle o el parque
– Utilizar vídeos de ejercicio pasivo y casero para que lo practiques en la sala de tu casa, hay unos que incluyen ejercicio físico junto a tu bebé.
Es importante que tengas claro, que si decides retomar lentamente el ejercicio, comenzarás a sentir más cansancio, por ello es recomendable que no te excedas tanto ya que entre el cambio de hormonas y amamantar a tu bebé quedarás exhausta.
2. Amamantar hace rebajar: si, así como lo lees mientras haces la hermosa labor de alimentar a tu bebé, puedes perder peso. ¿Cómo funciona? Mientras tu hijo come utiliza 500 calorías adicionales de tu cuerpo diariamente, situación esta que te ayuda a quemar esa grasa que acumulaste mientras estabas embarazada.
Como tu bebé se alimenta de ti, debes recordar que tus comidas deben ser ahora mucho más saludables que antes y en mayor cantidad, pero no te precopues que eso no quiere decir que engordarás, porque tu alimentación debe ser sana y saludable.
Tip curioso
Es importante que sepas que si haces algún tipo de dieta mientras das de lactar, tu cuerpo no producirá la suficiente leche materna y debido al bajo peso, esta (la leche) podría recibir toxinas que se irán directo al cuerpo de tu bebé, causándole consecuencias en un futuro. Motivo por el cual debes mantener una alimentación balanceada.
3. Cero estrés: sácate de la cabeza las preocupaciones por rebajar, todo a su debido momento, lo primero es tener a tu bebé comiendo sano y luego pensar en esos kilitos demás. Pero, no te descuides come tus frutas y vegetales en las meriendas y recuerda que fueron nueve medes de cambio, piensa que quizás ese sea el tiempo en recuperar nuevamente tu figura.
