La patata

Enseñar a nuestros hijos a comer patata, les dará un grado alto de hidratos de carbono para un buen crecimiento. La patata

La patata es un alimento muy completo rico en fibra y en hidratos de carbono. Aporta energía y tiene un precio muy asequible. Es un producto que siempre encontramos en el mercado, su obtención es fácil y gusta a niños y mayores en todos los tipos de elaboración. Es aconsejable consumirlas a diario.

 

El comer patatas además previene las enfermedades cardiovasculares, no todo el mundo sabe que su contenido en calorías y grasas es muy bajo. La mala fama de las patatas como alimentos que engordan debería ser revisada, así lo demuestran muchos estudios científicos que revelan que el consumo moderado del tubérculo reduce la presión arterial y no produce aumento de peso.

 

La patata tiene un gran porcentaje de agua. Además son una fuente importante de algunos elementos como magnesio, hierro, zinc, cobre, fósforo, potasio, azufre y vitaminas.

Por su contenido en potasio ayuda a evitar y prevenir la tensión muscular, por lo tanto es indispensable en personas que practican deportes. Colabora también como elemento esencial en la actividad del cerebro.

 

Su fibra es muy beneficiosa, ya que no se digiere y facilita la función intestinal.

 

Este alimento goza del gusto de todos y con ella siempre se acierta, ofrece muchas posibilidades culinarias: en puré, asadas, fritas, guisadas, rebozadas, en tortilla… Conviene prepararla sin excesiva grasa, e introducirla con diferentes recetas en la dieta habitual.

 

La patata además es un alimento que se conserva muy bien y no requiere muchos cuidados. Mantiene su calidad y sus cualidades por largo tiempo. Este producto venido de américa ha sido incorporado a todas las dietas. Es el cuarto alimento más consumido del mundo.

Incluso se utiliza como elemento para limpiezas de cutis, y en algunos otros tratamientos de belleza.

Según sea la preparación de la patata el aporte calórico varía: 

Patatas al vapor: es la forma más favorable para la conservación de las cualidades nutricionales de la patata. Se pueden utilizar como guarnición. Son fáciles de preparar y digestivas. Se pueden consumir también como primer plato aliñadas con aceite y vinagre, y acompañadas de alguna verdura.

Puré de patata: La patata aplastada tiene un mayor aporte de energía. Es bueno por eso no abusar de los purés en escamas que carecen de las propiedades de la patata.

Patatas fritas caseras: Absorben el aceite de la preparación, esto multiplica su valor calórico. Son las que más nos gustan a todos, pero son las primeras a eliminar de las dietas de adelgazamiento.

Patatas fritas de bolsa: Son las más calóricas, absorben más grasa, al estar preparadas en láminas muy finas. En contra de lo que podamos pensar y consumir, son las que menos aporte nutricional nos proporcionan.

 

Patatas al horno: La cocción prolongada y a altas temperaturas de la patata tiene varias consecuencias sobre su valor nutritivo: Reseca la patata y destruye gran parte de la vitamina C, que es sensible al calor. Se pueden consumir, sin abusar de esta preparación.