Se dice que hay incompatibilidad Rh cuando el Rh de la futura mamá y del feto son opuestos y pueden llegar a provocar problemas de salud. Descubre todo lo que necesitas saber sobre este tema en el siguiente artículo.
¿Qué es el Rh?
Durante muchos años la incompatibilidad Rh ha sido muy peligrosa y con graves consecuencias. Pero gracias a los avances farmacológicos y médicos, una vez se detecta este riesgo en la actualidad, existe un tratamiento preventivo que se debe administrar a la madre a través de vacunas.
La incompatibilidad Rh aparece cuando una mujer que tiene Rh negativo tiene un bebé con Rh positivo. En estos casos los glóbulos rojos del feto son detectados por el cuerpo de la mamá como unas sustancias extrañas, desencadenando una respuesta inmunológica en ella. El cuerpo de la madre comienza a producir anticuerpos contra los glóbulos Rh positivos del bebé.
Son cuatro los grupos sanguíneos existentes: A, B, AB y O. Estos grupos se clasifican dependiendo de la presencia de una proteína específica que se encuentra en la superficie de los glóbulos rojos. Si el Rh contiene esa proteína será positivo, y si no la contiene será negativo. En cualquier caso la gran mayoría de la población tiene un Rh positivo.
Si una mujer que tiene un Rh negativo y un hombre que tiene un Rh positivo conciben un bebé, éste puede ser positivo lo que hace bastante probable la aparición de esta incompatibilidad entre el hijo y la madre comenzando el mecanismo de defensa por parte de la madre para defenderse. Dicho mecanismo de defensa que comienza el cuerpo gestante necesita un tiempo para desarrollarse, por lo que por norma general, la incompatibilidad Rh no suele ser un problema si se trata de un primer embarazo, siempre que no haya habido abortos previos.
Pero sí que es cierto que durante el momento del parto, la sangre de mamá y la de su hijo pueden llegar a entremezclarse en cuyo caso, la mamá sí que comienza a producir anticuerpos para conseguir atacar a las proteínas Rh que están entrando en su propia sangre.
Prevención de la incompatibilidad Rh
Una madre con Rh negativo que haya concebido un bebé con un hombre que tenga Rh positivo, debe informar al médico desde el mismo comienzo del embarazo ya que al contar con riesgo de incompatibilidad, se deben adoptar las medidas adecuadas profilácticas.
El tratamiento consiste en aplicar una inyección de inmunoglobulina Rh aproximadamente durante la semana veintiocho del primer embarazo y otra inyección en las setenta y dos horas posteriores al parto. Esta inmunoglobulina Rh actúa como lo hace una vacuna impidiendo así que el cuerpo de la mamá genere anticuerpos peligrosos Rh que pueden llegar a causar complicaciones muy serias al recién nacido o incluso complicar un futuro embarazo. Por eso es tan importante que tanto el futuro papá como la futura mamá conozcan su Rh para avisar desde el primer momento al médico y evitar problemas de salud tanto a la futura madre como al futuro hijo.