¿Dónde nació el mazapán?

Uno de los dulces navideños que levanta más pasiones entre los amantes de la buena repostería, es sin lugar a dudas, el mazapán. ¿Dónde nació el mazapán? El origen del mazapán

Aunque son muchos los dulces que se degustan sobre todo durante estas fiestas navideñas, como los turrones, las peladillas, los roscones, el mazapán está considerado por los expertos y por quienes no lo son tanto, el rey de las navidades por su finura y sabor delicado entre otras cosas.

Son varias las versiones sobre el nacimiento del mazapán aunque dos de ellas son ls que pueden ser consideradas como más relevantes: la del origen italiano del mazapán y la del origen toledano. Sobre la versión italiana podemos contar que fue una noble de Italia la que hizo construir un monasterio en Sicilia cuyas monjas eran casi todas de origen griego y se dedicaban a la elaboración de una masa de almendras y azúcar con la que formaban pequeñas figuras que pintaban con colores que extraían del azafrán, del pistacho o incluso de las rosas. Pero es en la era cristiana cuando se incorpora esta masa de almendras a la celbración de la Pascua con el nombre de marzapane, en italiano.

Según cuenta la historia del origen toledano del mazapán, es en el siglo XI cuando hace su aparación este dulce aunque no se propaga hasta dos siglos después. Se comenta que fueron las monjas del convento de San Clemente de Toledo, mientras una hambruna que padeció Castilla, concretamente tras la batalla de Navas de Tolosa que ante la escasez de alimentos encontraron azúcar y almendras con los que fabricar este dulce y así dar de comer a los más hambrientos.

Receta casera del mazapán

Para hacer mazapanes en casa para cuatro personas tan sólo se necesitan 400 gramos de almendras molidas, 400 gramos de azúcar, 3 cuharas de agua y 1 clara de huevo. En una fuente honda se colocan las almendras con el azúcar y el agua, se amasa bien y se deja reposar durante un par de horas, más o menos. Pasado este tiempo se comienzan a hacer las figuritas elegidas: animales, adornos de navidad, muñecos (en esta parte nos pueden ayudar los más pequeños de la casa), y se colocan en una placa de horno. Se bate bien la clara del huevo que se utiliza para pintar las figuritas de mazapán con ayuda de un pincel de cocina y de esta manera aportarlas el  brillo característico de estos dulces. Se introducen al horno durante unos dos minutos a 200 grados centígrados o hasta que esté bien dorada la superficie, se sacan, se dejan enfriar y ¡a comer!.