Disfruta de una fiesta en casa

Sin lugar a dudas una buena música, comida, bebida y amigos son los ingredientes principales para que una fiesta llegue a ser todo un éxito entre los asistentes. Pero ¿qué pasa el día después? Disfruta de una fiesta en casa Celebrar una fiesta en tu hogar

Preparar una fiesta inolvidable en casa, es uno de los planes más divertidos que se puedan imaginar. Pero es necesario estar preparado ante los imprevistos que puedan surgir, como un vaso que se cae y que consigue que el suelo se convierta en el lugar más pegajoso del mundo, restos de comida por cada uno de los rincones de la casa, baños sucios… No desesperes, hay algunas claves para conseguir disfrutar de una fiesta ideal evitando los momentos más incómodos que surgen después.

Lo primero que hay que hacer es llamar a todos tus amigos y si traen a gente que no conoces, mucho mejor. En una fiesta cuanto más gente acuda es seguro que será más divertida a la par que conseguirá ampliar tu círculo de amistades y el de los demás invitados.

Claves para una fiesta perfecta

Lo primero que hay que hacer es retirar los muebles y dejar un espacio lo suficientemente ancho para que nadie se tropiece con ellos y por ende, no los estropee y se pueda bailar. Bajar las luces y colocar una mesa en el centro con la comida y bebida, retirando cualquier objeto que se pueda estropear o incluso romper, es algo a tener en cuenta, pues ya se sabe que si algo se puede estropear, se estropeará.

Conseguir un variado surtido de música de todos los estilos, aunque no sea del agrado del anfitrión, asegurará un éxito rotundo, sin olvidarse de poner ritmos divertidos que a lo largo de la noche no deben faltar. Relativo a la comida, hay infinidad de menús de preparación sencilla y económica, que evitarán una pérdida de tiempo en la cocina y que permiten ser degustados de pie, estilo cóctel, como una delilciosa ensalada de pasta, canapés variados, una empanada de carne o de atún o incluso unos nachos aderezados con cualquier salsa.  

Como es normal, la bebida no puede faltar. Refrescos, un buen vino o incluso una deliciosa caipiriña preparada con hielo picado, rodajas de lima, azúcar moreno y algo de ron, conseguirán entusiasmar a todos los invitados. Una recomendación: utiliza vasos de plástico, manteles y servilletas de papel, así como platos y cubiertos de usar y tirar, que te conseguirán  ahorrar trabajo y limpieza al día siguiente. Esto último no tiene porque resultar nada vulgar si se adornan, por ejemplo los vasos, con unos pequeños lazos de papel de un color llamativo, para darles un toque especial. Colocar las servilletas, simplemente enrolladas y atadas con una cinta sobre los platos, también conseguirá darle cierto toque de distinción a la presentación aunque estemos hablando de platos de plástico.

Ya sólo queda decir: ¡A disfrutar de la fiesta!