Si no vas a dar el pecho a tu bebé, entonces será necesario prepararle biberones. Para
que no te aparezca ninguna duda sobrre este tema, vamos a contarte a continuación todo lo que tienes que saber.
Primer paso: cuidado con la higiene
Tanto el biberón, como su tapa y por supuesto la tetina, deben estar perfectamente esterilizados antes de preparar la comida de tu bebé, especialmente durante sus primeros seis meses de vida. Lo mismo tiene que pasar con las manos que lo preparn, para evitar pasar a la leche posibles gérmenes.
Segundo paso
Una vez bien esterilizadas todas las partes del biberón, se debe colocar la cantidad de agua exacta, hervida previamente, dentro de éste. Y es que si se echa primeramente la leche en polvo, puede suceder que no se disuelva bien y se quede pegada al fondo. Para poder controlar la cantidad de agua, será mejor ponerse el biberón a la altura de los ojos y estando éste en una superficie que sea plana como por ejemplo una mesa.
Tercer paso
Si se ha hervido el agua y está fría a la hora de preparar el biberón, se puede calentar dentro del mismo bien en el microondas o bien en un calienta biberones. Si se va a utilizar agua que esté hirviendo, hay que dejarla enfríar un poco hasta los 50 grados centígrados como mínimo, antes de verter la leche en polvo, ya que se pueden eliminar algunos de los nutrientes y de las vitaminas que se encuentran presentes en ella. Además existen algunos tipos de preparados de leche que son muy sensibles al calor y pueden llegar a generar grumos cuando el agua está muy caliente y se tapona el biberón. La temperatura correcta por tanto es entre 40 y 50 grados centígrados y se puede comrpobar cuando se llena el biberón y no se evapora o cuando puedes sujetarle y no te quemas las manos. Pero si quieres asegurarte, utiliza un termómetro.
Cuarto paso
Ahoraes el momento de introducir la leche en polvo con la medida exacta dentro del biberón. Si es uno con cuello ancho, no habrá problema, si son biberones más estrechos, se puede usar un embudo.
Quinto paso
A continuación se debe tapar el biberón herméticamente y agitarlo hasta que se haya disuelto por completo el polvo. Para evitar salpicar se puede colocar el tapón o cubriendo los agujeros de la tetina con tus dedos bien limpios. Hay que procurar que no se creen demasiadas burbujas al agitarlo.
Sexto paso
Es muy importante que antes de dar a tu bebé el biberón, se compruebe la temperatura para evitar que se queme. La temperatura perfecta es de 37 grados centígrados aproximadamente. Para ello puedes echar unas gotas en el dorso de tu mano o en la muñeca. Si no te quema, puedes dárselo. Si está muy caliente, puedes enfriarlo poniéndolo bajo el agua del grifo.
