Bebés con labio leporino

El labio leporino se presenta en cientos de bebés diariamente y aunque las causas no están determinadas si tiene relación directa con antecedentes familiares. Es una afección que puede ser corregida con ayuda medica pero sobre todo por parte de los padres del pequeño. Bebés con labio leporino Ser madre es una experiencia única para toda mujer y sueñan con el bebé perfecto: sano y hermoso. Pero a veces nacen con diferencias a los niños comunes como alteraciones neuronales o rasgos físicos como labio leporino. Pero a pesar de que tengan ciertos aspectos físicos que no se esperaban no quiere decir que sean un ser de otro mundo, que tengan menos capacidades que los demás niños o que tengan que ser criados de manera diferente o aislados. 

Es común que los padres se sientan preocupados o asustados por la situación que se viene encima pero hay que tener en cuenta que no son limitaciones y que con apoyo y compañía, los pequeños pueden superar esta situación desde diversos puntos de vista: aprendizaje al hablar normalmente y sicológico para entender que son personitas comunes y corrientes. El labio leporino es una afección que divide o separa el labio superior. 

Esta característica se presenta porque el bebé no se formó correctamente mientras crecía en el vientre de su madre. Afortunadamente cuando el labio es bien tratado, no hay consecuencias y menos urgentes a largo plazo, pero lo importante es tener las terapias y los tratamientos adecuados. Las causas exactas no se establecen aun pero puede haber relación genética o antecedentes familiares. 

Como se corrige?

Corrección completa aun no existe pues siempre habrá alguna secuela pero generalmente se interviene de manera quirúrgica cuando el bebé está entre los 3 y 4 meses de edad. Si la hendidura es muy profunda se realizan varias intervenciones. Hay varios especialistas que tienen una relación directa con el avance del bebé.  Inicialmente está el cirujano plástico que realiza la cirugía para que la boca y sobre todo el movimiento de los labios tengan un correcto funcionamiento y sobretodo que el aspecto físico no cause mucha impresión o hagan sentir mal al niño. Un especialista genético analiza los antecedentes de la familia y los datos del bebé para establecer la posible causa. 

Un tercer paso es el uso de las terapias de lenguaje para corregir problemas de habla que generalmente de presentan.  Un sicólogo apoya este proceso al orientar y ayudar a superar problemas emocionales y sociales tanto del pequeño como de los padres. Aunque también hay que tener en cuenta que a pesar de que se cuenta con un respaldo médico total, el papel de los padres es muy importante y así como tienen las mismas necesidades de cualquier bebé, las necesidades no siempre se satisfacen rápidamente y la paciencia juega un papel esencial.  Hay factores más específicos como:

– La alimentación es diferente dependiendo de la gravedad de la hendidura.  El mayor problema es amamantar, pues el labio no puede adherirse con el pezón, pero existen biberones que tienen diseños especiales para facilitar la alimentación del bebé. También hay enseñanza médica para que la madre aprenda a hacerlo correctamente. 

– El manejo del lenguaje y en general del habla es importante y por eso hay que ser responsables con las visitas al médico y los terapeutas  para que el niño pueda expresarse bien y que sea entendido.
– Por último el aspecto físico es importante protegerlo y hacerle entender que no es un ser de otro mundo, ya que puede recibir críticas y burlas de parte de otras personas.  Es importante que reciba cariño, apoyo y amor.