Fobia escolar

Algunos niños no quieren concurrir a clases en sus primeros años de escuela. Muchos lloran, gritan y hacen todo tipo de escenas con tal de poder faltar al colegio. Por eso, en este artículo se explica cual es el motivo detrás de éste tipo de actitudes, y lo más importante como revertir tan frustrante situación. Fobia escolar Ansiedad y angustia por la separación

Algunas veces el motivo de éste comportamiento anti escuela, es el miedo intenso y la ansiedad que sufre el pequeño por separarse de sus padres. Muchas veces los niños sienten preocupaciones irracionales acerca de no volver a ver a sus padres, o temen que algo les suceda sin el cuidado de los mismos. Esto se debe a que los niños, desde que son pequeños, están acostumbrados a la seguridad que se les provee por parte de su familia cercana. Por eso, cuando se encuentran inmersos en un medio extraño, como lo es la escuela, estallan con angustia y ansiedad ante la separación temporal. 

Fobia escolar

La ansiedad y medio intenso a la separación que se mencionó anteriormente, se expresa por el niño a través de llanto, gritos o escándalos cada vez que se aproxima la hora de concurrir a clases. Este comportamiento no es necesariamente reconocido como «miedo» para el niño, sino que simplemente presenta una negativa ante la idea de estar en el recinto escolar. 
No necesariamente tiene que existir una base real para esta negativa, sino que puede tratarse de un miedo irracional y sin motivo alguno. Pero si estos actos son recurrentes por al menos 6 meses, entonces se puede empezar de hablar de fobia en cambio de una simple ansiedad elevada. 
Los elementos que suelen conformar la fobia escolar son la duración prolongada de las negativas ante la idea de concurrir al colegio y que no existan motivos reales por los cuales no quiera concurrir a la escuela, es decir, miedos irracionales. En cambio si el niño asegura que es hostigado por un compañero, que tiene una mala relación con la maestra, que tiene dificultades de aprendizaje o problemas con el rendimiento, entonces no se trata de una fobia, sino de un miedo real que debe ser resuelto con la ayuda de los padres. 
También existe la posibilidad de que ese miedo no sea solo una fobia escolar. Si el niño afirma que siente vergüenza frente a sus compañeros, miedo de que se rían de él, se siente observado constantemente por las personas que lo rodean o teme tener una situación embarazosa, entonces puede tratarse de una fobia social.

Fobia social

La fobia social se caracteriza por un temor persistente ante las situaciones sociales fuera del marco familiar, y con individuos de la misma edad. Este tipo de actitudes, si son descubiertas, deben ser consultadas inmediatamente con un especialista en psicología infantil, de otra manera el problema no podrá ser resuelto. 

Revertir la fobia escolar 

Lo más importante es que no se permita que el niño siga evitando la situación que teme, ir al colegio. Si se le permite ésta evitación, por mas que tranquilice momentáneamente al niño, lo único que se logrará es aumentar la intensidad de la fobia o de la ansiedad, y se perpetuará en el tiempo.
Lo ideal sería insertar al niño en el ámbito escolar de a poco, puede servir que los padres, o uno de ellos, lo acompañen al colegio. También se puede hacer una inserción gradual en cuanto al tiempo que está el niño en la escuela. Se puede comenzar llevándolo por una hora, luego dos, y así paulatinamente hasta que complete el ciclo horario diario normalmente. 
Además es importante que los demás compañeros sean conscientes de lo que está pasando, y que sean asesorados acerca de como actuar con su compañero. Si la escuela cuenta con un psicólogo en ella, esto facilita la tarea, ya que al estar inmerso en la institución sabe como manejar la situación tanto con el niño, como con los padres, los maestros y los compañeros.