Los bebes a pesar de su corta edad también sufren de nervios o estrés y merecen sesiones de descanso y relajación y nada mejor que reciban este tipo de atenciones de parte de sus padres y mejor aun para reforzar los lazos desde una corta edad. 
Así como los adultos pueden disfrutar de masajes y momentos de relajación, los bebes ahora también tienen su espacio y esto es conocido como Shantala que además de relajar al pequeño también sirve para mejorar muchas de sus dolencias físicas, de sus malestares comunes y ayudarles a tener un mejor descanso. Esta técnica puede ser manejada por los papás o las mamás y mucho mejor que sean aprendidos por ambos para que haya una conexión total entre el pequeño y sus progenitores. Y así como los pequeños tienen necesidades fisiológicas como comer, dormir o jugar, también merecen un espacio de descanso y distensión pues a pesar de tener una corta edad y no entender muy bien todo lo que pasa, también sufren de estrés y nervios.
Estos masajes se toman como un medio para reforzar la relación entre padres e hijos, de que por medio de palabras, de sonrisas, de caricias, de el cruce de miradas y sobre todo el sentido del tacto para que el bebe se sienta tranquilo y para que los papás también tengan un poco mas de paciencia y control frente a las crisis que puedan presentar los niños y que pueden llegar a estresar a los adultos. Con respecto a la salud, este tipo de actividad permite minimizar los dolores, los gases que tanto los estresan, las afecciones gastrointestinales entre otros malestares. A pesar de que esto no es de las últimas décadas, la moda y el uso de costumbres adoptadas por la sociedad hacen que los bebés se cuiden mucho mas por medio de este tipo de prácticas que buscan un beneficio y que tratan de integrar el mundo oriental al resto de culturas.
Lo bueno de esto es que puede ser aplicado en las diversas etapas de su desarrollo y no importa la edad, hay ciertos ejercicios que serán apropiados para esto. Por ejemplo lo primero que se hace hacia los primeros meses es motivar la capacidad ocular estimulándola por medio de juegos en donde poco a poco reconocen diferencias entre el mundo que los rodea, por medio de ello y del uso de la voz, el bebe busca reforzar sus primeros movimientos como el de la cabeza o la espalda. Después hay un contacto entre los 6 y 12 meses de edad y aunque ya conoce a cada miembro de su familia es necesario interactuar con él y ahora que puede reconocer ciertas partes de su cuerpo las quiere utilizar con todos os objetos de su alrededor y además de una supervisión de los padres, debe haber un modo de compartir el tiempo y los juegos.
Seguido de esto viene la estimulación temprana que se da después del año y casi hasta los 3, pues es cuando se motiva a gatear, caminar, correr y demás, se ayudan a eliminar los miedos y a ganar ciertas capacidades en medio de su desarrollo. Siempre en cada una de estas sesiones y en las diversas etapas, es bueno realizarlo de una a dos veces y mínimo unos 45 minutos para que sea productiva.
