Jóvenes que limitan sus expectativas de vida

Uno de los mayores problemas que existen actualmente son los jóvenes que limitan sus expectativas de vida a sacar la secundaria y no volver a estudiar. Esto puede darse por problemas en el lugar donde viven, venir de familias problemáticas y la falta de autoestima. Jóvenes que limitan sus expectativas de vida

Es muy lamentable que las personas a tan jóvenes y sobre todo en las comunidades urbanas tengan una baja expectativa de su futuro. Terminar la escuela secundaria parece ser su mayor logro de la vida, y no hay nada más después de eso, siempre y cuando el objetivo sea aún alcanzado. Algunos recurren a las drogas y la violencia pero el problema de la expectativa viene por otros motivos antes de esto. La inteligencia muchas veces pasa desapercibida y las esperanzas y los sueños son pisoteados. Hay muchas razones por qué sucede esto. ¿Por qué estos adolescentes tienen un objetivo tan bajo? El medio ambiente en casa puede influenciar, muchos jóvenes en las comunidades urbanas provienen de hogares rotos, donde los padres tienen más de un trabajo mal pagado, y están siempre bajo tensión y presión a fin de mes. Algunos de estos adultos utilizan las drogas o son alcohólicos. 

Si bien no todas las familias tienen estos problemas extremos en particular, es fácil que los adolescentes no puedan esperar mucho de la vida cuando ven a sus padres luchar para lograr el alquiler de un lugar pequeño y llevar comida a casa. En la escuela, estos jóvenes están rodeados de compañeros que tienen problemas similares o peores. La falta de disciplina para muchos de ellos en la casa conduce a una falta de disciplina en la escuela. Los estudiantes sienten las bajas expectativas de sus hogares y muchos de sus maestros, y eso les duele, hace que les haga enojar, o simplemente se deprimen.  

En las calles hay una presencia de pandillas que establecen las reglas de conducta, y las redirigen a casa de estos adolescentes muchas veces. Los compañeros a veces se burlan, les dan una paliza, o amenazan a cualquier persona que intente desafiar su autoridad, aumenta el precedente en la clase, o se presentan de una manera más madura. Se asume automáticamente que los «niños inteligentes» creen que son mejores que los demás, y cualquier tipo de pensamiento es una amenaza personal a los «niños no tan inteligentes”. Esto literalmente puede ser una cuestión de vida o muerte por tan solo hacer una cierta expresión facial, ignorar un saludo o caminar por la calle equivocada en el momento equivocado. 

Los medios de comunicación hace que muchos jóvenes urbanos compren la cultura glorificada y ha crean en los vídeos musicales y películas un mundo de fantasía. La imagen de robar, matar, se involucran en el tráfico de drogas, y la falta de respeto por la ley. Por el contrario las imágenes positivas y exitosas en los medios de comunicación que refleja como es esta cultura son casi rechazadas por estas personas. Los noticieros confirman las creencias negativas sobre el sistema y les recuerdan las luchas que enfrentan día a día.

Como una manera de afrontar la situación, muchos jóvenes deciden no establecer metas altas como la universidad o una carrera sólida por el miedo al fracaso. Para evitar ser defraudados. Por lo que el porcentaje que se sale de este esquema es por un esfuerzo extra que hacen los padres los cuales dedican su tiempo a la disciplina y alentar a sus hijos para que puedan ser contribuyentes del éxito y fuertes a la sociedad.