La fertilidad es una de las palabras que hace sentir a los hombres fuertes y confiados, pero al saber que no pueden tener hijos, resulta desastroso para su autoestima. La mayoría de casos se da por causas genéticas, pero otro pequeño porcentaje, se ve afectado por condiciones externas, que son posibles de controlar. 
Puede ser algo que los marque y los afecte mucho y hay muchas razones para que esta situación se llegue a presentar. La mayoría de veces es porque no hay movilidad suficiente de espermatozoides y va ligado a un factor genético, que desafortunadamente es casi imposible de cambiar. Pero hay algunos aspectos externos, que pueden llegar a afectar la manera de reproducción masculina.
Lo que primero se piensa es que es a causa de la edad, pero en realidad es uno de los factores que menos tienen que ver. Lo que si puede dañar la calidad del semen y los resultados finales para llegar a un embarazo, es la obesidad o una deficiente dieta. Siempre es importante que se consuman antioxidantes, porque si no se tienen, es fácil que haya un deterioro en el esperma. De acuerdo a un examen que se realizo, cerca del 80% de los hombres que participaron del estudio y que tenían deficiencias en su esperma, no consumían frutas ni verduras.
Los hábitos como el fumar o el beber son pésimos y es peor cuando se combinan. El problema es que sus componentes y su efecto, genera daños en el sistema reproductor y si se presenta un embarazo, puede que haya abortos o aparición de malformaciones. En este caso, el tabaco, también puede generar daños en el útero y la calidad de la reproducción en la mujer. La marihuana es otro de los elementos que puede llegar a alterar la reproducción de los hombres y es que tiene más de 20 componentes que modifican el correcto funcionamiento, presentándose inmovilidad y poca concentración de espermatozoides.
El estrés también es uno más de los factores que se ha asociado a la infertilidad y es que éste malestar ha incrementado de una manera escandalosa y ha tenido repercusión en distintas zonas del cuerpo de las personas, dañando su salud, su físico, su mente y su tranquilidad. Incluso, el daño ha llegado hasta el sistema reproductor tanto de hombres como de mujeres. Cuando un hombre se encuentra expuesto a situaciones muy complejas de estrés, la calidad de su esperma baja considerablemente y es poco probable que no se presente un embarazo, por lo menos hasta que este estado pueda ser controlado. Muchos piensan que no es tan serio padecer de estrés, pero incluso, en las parejas que emplean métodos de reproducción asistida, los hombres se alteran y ponen nerviosos, por lo que el tratamiento a veces sufre algunas trabas y es necesaria la ayuda sicológica para que el cuerpo, la mente y la actividad hormonal y reproductiva regresen a la calma.
