Sin lugar a dudas las fiestas de Navidad son perfectamente compatibles con un embarazo aunque pueda parecer lo contrario, debido a esas jornadas de compras, a las fiestas nocturnas y sobre todo a las comidas y cenas más copiosas de lo habitual, siempre que tomes una serie de medidas preventivas que resulten compatible con este maravilloso estado en el que te encuentras. 
Disfruta de la Navidad y de tu embarazo
Lo primordial cuando se está embarazada es sentirse a gusto y orgullosa de una misma y más en estas fechas navideñas que es cuando podemos sacar más provecho de ello. Aprovecha estas fiestas para dejarte querer y poder lucir tu embarazo ante los familiares y amigos. Seguro que te agradará ser el centro de atención de todo el mundo.
En cualquier caso siempre piensa en tu futuro bebé y adapta tu estilo de vida según las necesidades del embarazo. Te resultará muy gratificante en cualquier caso pensar que las próximas navidades ya podrás tener a tu bebé entre tus brazos.
Estar embarazada no significa que no puedas vestirte de fiesta. Cómprate ropa bonita y elegante de premamá y luce tu embarazo con orgullo. Te hará sentirte más especial y más guapa de lo habitual.
Prevenciones durante el embarazo a tener en cuenta frente a los excesos navideños
Son muchos los amigos y familiares con los que te juntarás en estas fiestas y seguramente alguno de ellos fume. Evita los ambientes que se encuentren cargador del humo del tabaco para no convertirte en una fumadora pasiva, ya que podría perjudicar a tu bebé.
Intenta no ingerir nada de alcohol. Es mejor que lo sustituyas por agua o por zumos y si tienes que brindar con la familia, mójate un poco los labios. Ten en cuenta que por muy poca que sea la cantidad de alcohol que ingieras, éste podrías atravesar la barrera de la placenta y llegar al bebé.
Si te encuentras sana podrás comer todo lo que te apetezca aunque eso sí, de una manera equilibrada. Tu máxima durante estas fiestas debe ser comer con moderación para que las digestiones sean menos pesadas. Un consumo excesivo de polvorones, turrones o mazapanes puede hacerte coger más peso del recomendado, algo que no beneficia ni a tu bebé ni a ti.
Aunque tengas que asistir a muchas celebraciones, intenta siempre respetar las horas de sueño, ya que el descanso nocturno es sumamente importante para poder recuperar las fuerzas y la energía que te hacen falta.
Las compras es algo típico de la Navidad. Intenta organizarte de tal manera que no tengas que realizarlas todas a la vez y a ser posible busca esos horarios en los que hay una menor afluencia de personas para evitar agotarte.
Si tienes que viajar en estas fechas es importante que tomes una serie de precauciones. Intenta elegir desplazamientos cortos, sobre todo si estás en el último trimestre de la gestación y recuerda siempre estirar tus piernas y dar un pequeño paseo cada poco tiempo. De esta manera mejorarás la circulación sanguínea de las piernas evitando que se acumulen líquidos en los tobillos.
Por último y lo más importante, escucha siempre a tu cuerpo. Ante cualquier mínima señal de cansancio o de malestar, retírate a descansar y a relajarte. Si además estás sufriendo algunas molestias típicas de un embarazo, no te olvides de seguir los consejos de tu doctor siempre.
