Cómo bajar la presión arterial. Parte I.

La mejor garantía de una persona para estar sana es mantener la presión arterial dentro de unos niveles correctos ya que la hipertensión mal controlada puede dañar, sin darnos cuenta, todo nuestro organismo. Cómo bajar la presión arterial. Parte I. ¿Qué significa tener una tensión arterial alta?

Tener una tensión alta es una de las señales que se nos manda desde nuestro interior para indicarnos que algo no está funcionando como debiera en el organismo. Muchas son las personas que esperan que este síntoma desaparezca de una manera espontánea pero cuando hablamos de la presión que ejerce la sangre sobre nuestras venas, las cosas no son tan sencillas y hay que recurrir a otros métodos para que nuestro cuerpo recupere el equilibrio y nuestra presión recupere la normalidad.

Cuando la sangre circula a demasiada velocidad, va chocando contra las paredes de las arterias algo que hace, que a largo plazo, se sufran consecuencias negativas sobre el organismo si no se le pone remedio, lo que sucede en las personas hipertensas, llegando a provocar desde un infarto, hasta un derrame cerebral, sin olvidar posibles problemas en los riñones o en el corazón.

Según estudios realizados en los Estados Unidos por el Instituto Nacional de la Salud, uno de los principales problemas de esta enfermedad, es que las personas no saben cuales son los niveles correctos de la presión de la sangre. Mantener la presión sistólica, conocida como tensión alta, por debajo de los 120 mmHg y de 80 mmHg  la mínima, son los límites recomendados para evitar futuros problemas. En el momento en que estos niveles sean superados, debe acudirse al médico inmediatamente.

Consejos para mantener a raya la presión arterial

La parte positiva de este trastorno es que con unos hábitos de vida saludables, puede controlarse sin necesidad de acudir a fármacos de cualquier tipo, que aún en el mejor de los casos, pueden llegar a tener efectos secundarios sobre nuestro organismo. Para ello basta con seguir algunas sencillas  pautas como  controlar el peso o incluir alimentos en nuestra dieta que consigan regular la tensión arterial.
Por cada 10 kilos de peso que se pierdan, la presión arterial sistólica, es decir la alta, se reducirá entre 10 y 20 mmHg. Seguir una dieta rica en frutas y verduras a diario también puede hacernos reducir la tensión entre 8 y 14 mmHg. Reducir el consumo de sal y limitar el consumo de alcohol, nos ayudará también a reducir nuestro nivel de tensión arterial.
Hacer algo de ejercicio sin necesidad de salir de casa nos ayudarán de igual manera a mantener unos niveles apropiados de la tensión lo que evitará  una gran cantidad de riesgos que puede sufrir nuestro organismo causados por la  hipertensión.