Aumento de peso: menopausia o hipotiroidismo

La caída de estrógenos durante la menopausia acarrea una serie de síntomas, que en caso de ser muy agudos, se recomienda pedir al doctor un análisis de tiroides. Aumento de peso: menopausia o hipotiroidismo Tiroides y menopausia

A partir de los 45 años la glándula tiroides comienza a funcionar peor aunque no se sabe la relación que puede tener entre los cambios hormonales que se suelen producir a esta edad y la tiroides. Ésta última se encuentra situada en el cuello con forma de mariposa y es la encargada de ayudar a nuestro organismo a funcionar mejor ya que controla la energía que nos llega gracias a los alimentos que comemos y mantiene el ritmo cardíaco y la temperatura corporal. 

En ocasiones se llegan a confundir los síntomas de la menopausia con los trastornos de tiroides ya que estos últimos, sobre todo entre los 45 y 50 años de edad, coincidiendo con la etapa en que algunas mujeres comienzan a recibir los primeros avisos de la menopausia, no segrega suficiente cantidad de hormona tiroidea, lo que provoca cansancio, bajada de ánimo, pérdida de cabello, aumento de peso, etc, síntomas que coinciden con los de la menopausia por lo que en numerosas ocasiones el hipotiroidismo pasa desapercibido.

¿Por qué se aumenta de peso?

Según estudios realizados se ha demostrado que mujeres con alteraciones en la tiroides lo pasan bastante peor en la menopausia ya que los síntomas de ésta última se vuelven más intensos, algo que disminuye cuando la glándula tiroides se normaliza, por lo que se recomienda que todas las mujeres menopáusicas con síntomas muy severos se realicen las pruebas pertinentes para determinar si la glándula tiroides se ha alterado, para lo que tan sólo es necesario hacer una análisis de sangre conocido con el nombre de perfil tiroideo.

Pero hay que tener en cuenta que el tratamiento hormonal que en ocasiones se recomienda a las mujeres con menopausia para aliviar sus síntomas no ayuda para nada al tema de la tiroides, que aunque si bien es cierto que ayuda a compensar la caída de los estrógenos y por tanto, ayuda a que los síntomas no sean tan agudos, la paciente que tiene hipotiroidismo deberá recibir un tratamiento aparte y más complejo, siempre bajo supervisión médica.

Uno de los síntomas pero asumidos por las mujeres es el aumento de peso que se produce durante la menopausia o si se padece de hipotiroidismo y que es muy difícil de controlar. Por eso hay que cuidar la dieta durante esta etapa mucho. Comenzando con los carbohidratos hay que decir que se deben tomar casi exclusivamente los que se absorben más lentamente, es decir el arroz, legumbres y cereales integrales y olvidarse casi por completo de los dulces. Las proteínas se deben intentar conseguir de fuentes tan sanas como el pescado evitando la carne roja. Es muy importante no olvidarse de los lácteos, ya que la caída de los estrógenos va debilitando los huesos por lo que se necesita un aporte extra de calcio. Eso sí bajos en grasas. No se puede dejar de tomar grasas, que aparte de ser una fuente de energía,  ayuda a absorber ciertas vitaminas que producen hormonas, pero debe intentar consumirse sólo las de origen vegetal que se encuentran en el aceite de oliva, en los frutos secos, aceitunas, etc.