Muchos de los padres de la actualidad se encuentran confusos acerca de como educar a sus hijos, y algunas veces por parecer modernos y liberales desatienden temas fundamentales de la crianza. Por eso, a continuación, se explican las reglas imprescindibles para fomentar un desarrollo saludable en los hijos. 1. Se debe dejar bien en claro el tipo de educación que se quiere trasmitir a los hijos. Muchos padres tienen diferencias entre ellos acerca de lo que piensan y en su forma de actuar. Este tipo de diferencias se refleja también en el tipo de crianza que se quiere dar a los hijos. Por eso no se debe hacer de la crianza un punto de divergencia, sino que al contrario, debe ser un punto de encuentro de ideas acerca de la crianza que se le quiere dar al niño.
2. Se debe estar siempre de acuerdo acerca de los valores que se le quieren trasmitir al hijo. Es fundamental que los padres enseñen a sus hijos de una manera clara y coherente, para eso debe haber un consenso donde se incluyan los valores de ambos padres.
Estos valores constituyen los rasgos culturales e ideológicos de cada uno de los padres, los cuales están definidos por los principios sociales aceptados y mantenidos por la familia, un grupo o la sociedad. Los valores representan lo que es importante para determinadas personas, los cuales pueden variar en cada uno, por eso es importante ponerse de acuerdo acerca de cuales serán los valores con los que se educará al niño.
3. Se le debe mostrar a los hijos que existen reglas y límites. Estas reglas deben ser obedecidas por todos en la familia o en el hogar, en caso contrario el niño se volverá inseguro e inestable. Es importante saber que los niños requieren de límites para saber que es lo que esta bien y que es lo que esta mal, una necesidad que se torna aún mayor cuanto más pequeño es el niño. Esto se debe a que la base moral, de valores y comportamientos, se comienzan a incorporar en una edad muy temprana. Las reglas y límites que aprendan de pequeños serán sus parámetros para la convivencia y desarrollo futuro.
4. Se debe hablar positivamente con los hijos. El hacerlo desarrolla positivamente la autoestima del niño. Muchas veces los padres llaman la atención a sus pequeños hacia lo negativo, dejando sin valorizar sus actuaciones positivas, como si solamente el deber fuese regañarlos cuando hacen algo incorrecto o peligroso. Pero los niños necesitan saber también cuando están actuando correctamente, eso hace que se sientan valorados y alentados hacia los buenos comportamientos.
5. Se debe oír siempre lo que el niño tiene para decir. Se debe prestar atención a los pensamientos e ideas de los niños, de forma que es importante no interrumpirlos ni ridiculizarlos. Es necesario permitir que los hijos expresen sus puntos de vistas, ya que de esta manera están conformando la seguridad en ellos mismos. Además al escucharlos se puede descubrir lo que el niño piensa de su entorno y su familia. Además así se puede saber como entiende todas experiencias y situaciones que va viviendo a diario.