Papillas ideales para la merienda de tu pequeño

Toma nota de alguna de las siguientes papillas que puedes dar a la hora de merendar a tus hijos, especialmente a partir de los nueve meses de edad, y que resultan muy completas ya que contienen fruta, leche y cereales para que estés tranquila y para que a tu bebé le encante. Papillas ideales para la merienda de tu pequeño

Papilla de melocotón y de sémola

  • Esta papilla tan saludable lleva los siguientes ingredientes:
  • Doscientos ml de leche adaptada para bebés
  • Tres cucharas de sémola
  • Una cuchara pequeña de cacao en polvo
  • Un melocotón

Para prepararla deberás comenzar calentando la leche y después añadirle el cacao y la sémola para llevar todo a ebullición y dejar que hierva durante aproximadamente tres minutos, eso sí, removiéndola todo el rato para evitar que se pegue.

Por otra parte se escalda el melocotón en agua hirviendo para después pelarlo y terminar cortándolo en trozos pequeños. Coloca la papilla en un plato hondo  una vez hayas conseguido enfriarla un poco y añade los trozos de melocotón.

Papilla con pan tostado

Perfecta para que tu bebé la tome a partir de los nueve meses, esta papilla además de con pan tostado, puede hacerse con cualquier otro tipo de frutas como por ejemplo una pera o un albaricoque. Esta papilla resulta muy nutritiva ya que combina los cereales con la fruta y la leche.

Ingredientes:

  • Doscientos ml. de leche adaptada de bebés
  • Tres rebanadas de pan
  • Un trozo de melón

Comienza tostando el pan y desmenuzándolo en trozos muy pequeños con las propias manos. En un bol coloca estos trocitos de pan y echa la leche, calentada previamente, por encima. Añade el melón cortado en trozos pequeñitos y ya puedes ofrecérsela a tu pequeño al que seguro le encantará. Recuerda que puedes cambiar los trozos de pan por la fruta preferida de tu bebé.

Papilla de sémola y fresas

Esta papilla puedes dársela a tu bebé a partir de los siete meses de edad y resulta ideal para comerla  durante los meses más calurosos. La sémola le va a aportar energía y la fruta las vitaminas y el agua que necesita a diario. Una buena idea es ir cambiando la fruta cada vez que se la prepares para que tu hijo se vaya acostumbrando a diferentes texturas y sabores.

Ingredientes:

  • Noventa gramos de sémola integral
  • Cincuenta gramos de fresas
  • Una cuchara de aceite de oliva

En una cacerola coloca  un poco de agua y vete añadiendo poco a poco la sémola sin dejar de removerla con la ayuda de unas varillas metálicas, para evitar que se pegue y continuar hasta que esta mezcla comience a hervir.

Una vez conseguido se retira del fuego y se deja que repose durante unos cinco minutos, tiempo en el que la sémola irá absorbiendo todo el líquido. Mientras tanto vete lavando la fruta que hayas escogido, en este caso las fresas, y córtalas en trozos muy pequeños.

Añade la fruta junto con el aceite y la papilla y pásalo todo muy bien por la batidora antes de dársela como merienda a tu bebé.