Pasos para unas buenas vacaciones durante el embarazo

Las vacaciones y el verano son estupendas durante el embarazo porque la madre alcanzará un nivel de relajación importante, pero hay que saber controlar ciertos factores para que no se presenten riesgos. Pasos para unas buenas vacaciones durante el embarazo Es verdad que estar embarazada no es una enfermedad, pero requiere quizá muchos más cuidados porque el objetivo es traer al bebé al mundo totalmente saludable. Algo de lo que deben cuidarse las mamás es que ciertos factores durante el verano, como tomar el sol o visitar las piscinas, pues no siempre será seguro o lo más recomendable, dependiendo de las condiciones de cada embarazo.

1. El sol es lo característico de las épocas de verano y debido al agujero en la capa de ozono, la protección debe ser muy alta, además que las mujeres que están en embarazo tienen mayores riesgos de padecer de melasmas o decoloración y manchas en la piel, por el rápido y constante cambio hormonal que sufren durante los 9  meses. Lo recomendable es aplicar bloqueador solar todos los días, así haya exposición solar o no. Es bueno emplear un sombrero para cubrir aun más el rostro y reducir los riesgos de quemaduras o insolación.A la hora de escoger un protector solar, es bueno que tengan protección contra rayos UVB y UVA, porque los primeros generan las quemaduras de piel superficiales pero dolorosas, mientras que los segundos son los encargados de generar el cáncer de piel a mediano y largo plazo, por falta de cuidado. 

2. La deshidratación es algo que no se siente de inmediato, pero si ocurre muy a menudo, por las condiciones climáticas y el exceso de sudor. Es por esto que es necesario que se consuman cerca de 2 litros de agua al día, sobre todo cuando hace más calor. Pero lo que deben cuidar es justamente esas fuertes olas de calor, porque son bastante riesgosas para las mujeres embarazadas, sobre todo en los inicios del embarazo, porque puede hacer que el bebe tenga malformaciones durante su desarrollo. Un consejo y recomendación que suelen dar los ginecólogos, es que es importante evitar saunas y jacuzzis, pues son lugares con un cambio de temperatura muy fuerte que el bebé no está acostumbrado a soportar. 

3. Los insectos son comunes cuando hace calor, pero hay que saber cuidarse de ellos y sus picaduras. El problema es que solo una picazón puede llegar a transmitir enfermedades graves, que repercuten en la salud y la formación del bebé. Si una mujer se siente mareada, con fiebre, excesivo dolor de cabeza y aparición de granos o erupciones en la piel, será necesario visitar al médico. 

4. Para las que visitan el mar, es mejor que usen chalecos salvavidas en zonas profundas, pero siempre hay que tener una opinión del médico para que apruebe la decisión de sumergirse al mar, porque el movimiento fuerte de las olas, puede generar peligros.