¿Cómo sacar el deportista que todo niño lleva dentro?

El ejercicio físico es muy necesario para el desarrollo íntegro de toda persona, sobre todo de los niños, ya que su práctica favorece la formación de un cuerpo totalmente sano y con resistencia, además de incentivar la mejora de capacidades intelectuales como la memoria y la concentración. Por si fuera poco ayuda en la mejora de las habilidades sociales, cultivándose valores como el respeto y la cooperación. Pero, ¿sabes que puedes hacer para encauzar a tu hijo en esa dirección para que saquen el deportista que lleva dentro?

Diversión

Los primeros años en la vida de un niño son muy importantes, ya que descubre facultades que tiene como el equilibrio, la coordinación, movilidad y flexibilidad. Según estudios llevados a cabo, resulta de vital importancia que el desarrollo de las funciones psicomotrices de un niños comience después de los nueve años y antes de los catorce, ya que a edades anteriores el concepto de deporte no tiene importancia ni significado. Por eso los padres deberían incentivar el ejercicio físico a través de juegos para que los pequeños se vayan familiarizando con la práctica de deportes.

Por otra parte si los padres practican deporte, también influirá en la disposición de los niños hacia el ejercicio físico, es decir, el ejemplo de los progenitores funcionará como refuerzo positivo en un niño que estará más dispuestos a comprometerse con el deporte. De cualquier manera hay que tener cuidado ya que una presión familiar excesiva por el deporte, puede crear en el niño el conocido como Síndrome de Saturación Deportiva, que se traducirá en estrés excesivo, fobia y desinterés por el ejercicio. Resumiendo, no hay que presionar a los niños y respetar sus decisiones en lo que se refiere al deporte.

Reconocer el objetivo del entrenamiento

El éxito deportivo, según los especialistas, radica en la expansión de las capacidades motoras del niño a lo que hay que sumar, un correcto seguimiento médico, pedagógico y nutricional para que goce de buena salud. Es decir, que el objetivo principal es que tu hijo se cree un hábito de hacer deporte para que lo disfrute y pueda además mejorar su salud y su vida.

Y es que en algunas ocasiones los padres presionan a sus hijos para que consigan trofeos y medallas para evaluar así su éxito en el deporte, pero esto es una práctica muy negativa ya que puede suceder todo lo contrario, que se alejen de la práctica del mismo. Por ello los padres tienen que animar a sus hijos a que lleven a cabo cualquier actividad física aceptando sus limitaciones y sin esperar que sean los mejores.

Conclusión

El deporte y los niños son una fórmula esencial para el desarrollo de los mismos y cuyo principal objetivo es que gocen de muy buena salud. De cualquier manera hay que tener en cuenta que son niños, y como tal hay que adaptar las actividades físicas a su edad para que no realicen esfuerzos que excedan a sus capacidades.