Agotamiento físico durante el embarazo

Muchas son las mujeres que durante el embarazo se ven afectadas por un gran agotamiento físico, sobre todo durante el primer trimestre y en las últimas semanas anteriores al parto. Y es que el proceso de gestar una vida implica numerosos cambios hormonales y físicos que afectar a los niveles de energía de la futura mamá, reflejándose entre otros síntomas, en agotamiento.

¿Qué sucede en el embarazo?

Aunque es un período muy bonito para la mujer, el embarazo también es complicado, debido sobre todo a la gran cantidad de energía que se requiere para los diferentes cambios psicológicos, físicos y hormonales que se producen dentro del organismo.
Además de estos cambios, se añaden síntomas como somnolencia o vómitos y náuseas por las mañanas, que aunque no son problemas de riesgo, suponen un desgaste emocional y físico para la futura mamá.

Insomnio y cambios hormonales

El cambio hormonal provoca fatiga, sobre todo como hemos dicho anteriormente, durante el primer trimestre del embarazo, y esto se debe a la relación existente entre las hormonas sexuales y la regulación del sueño.

Durante el embarazo los niveles de progesterona se incrementan, y estamos hablando de una hormona sexual femenina que tiene propiedades anestésicas, ansiolíticas y somníferas. Además influye en el proceso respiratorio y en la temperatura del cuerpo. Por ello es normal que cuando aumenta la cantidad de esta hormona, se acentúe la sensación de cansancio y de sueño.

Cambios fisiológicos

El proceso de adaptación que va atravesando el cuerpo de una mujer durante el embarazo, resulta increíble. Por ejemplo, en el tercer trimestre, el bebé ocupa mucho más espacio en la zona abdominal de la mamá lo que hace que su interior tenga que cambiar. Así el útero tendrá que empujar a otros órganos más cercanos como los pulmones, el hígado, la vejiga, el intestino y el estómago entre otros, cambios que van a provocar malestares que dificultarán en ocasiones, el descanso de la madre y hará que se encuentre más cansada.

Náuseas durante el embarazo

Un estudio realizado ha podido demostrar que hay una enorme relacióno entre las náuseas y el nivel de agotamiento físico durante el embarazo, comprobándose que las mujeres que tienen náuseas severas presentan un nivel de fatiga más elevado que las que padecen molestias más moderadas o no tienen ninguna. Es decir, cuando más severas sean las náuseas de una mujer que está embarazada, mayor va a ser su agotamiento físico.

Anemia

Por regla general las mujeres se encuentran expuestas a tener los niveles de hierro en sangre más bajos, sobre todo las que están embarazadas. Por eso es muy importante vigilar el consumo del mismo, para ir reponiendo la pérdida de glóbulos rojos y poder cubrir las exigencias de la placenta y del bebé. De hecho las necesidades que va teniendo el feto van aumentado según lo hace el embarazo, hasta tal punto que durante el segundo y tercer trimestre, no pueden cubrirse solamente con la dieta de la madre.