Descubrir las propiedades de la zanahoria nos hará incluirla en la dieta de nuestros hijos con frecuencia. Es un vegetal que aporta muchos nutrientes. 
La zanahoria es uno de los vegetales convenientes en la dieta de nuestros hijos. Es rico en fibra y vitaminas. Además la zanahoria es antioxidante y depurativa, dos cualidades más que valorables, para cualquier dieta. De ese modo, y acompañado de ejercicios, nunca les va a perjudicar su consumo, conseguirás que se sientan mejor ya que aporta vitaminas y hace bien a la vista, entre otras cualidades.
Además de ser un rico alimento, en concreto es de todas las raíces la que más minerales y vitaminas tiene, es uno de los recursos terapéuticos más valiosos para tratar diversas enfermedades y prevenir otras: es un buen antiséptico, actúa sobre la sangre beneficiándola: en concreto contribuye a renovar la sangre y aumentar su contenido en glóbulos rojos, lo que la hace muy eficaz contra la anemia; facilita la curación de catarros e interviene positivamente en afecciones asmáticas reumáticas, disminuye la acidez de estómago entre otros. Mezclada con miel y limón es eficaz para las afecciones de garganta. El poder cicatrizante de la zanahoria no sólo se presta a un uso interno, ya que es beneficiosa para las úlceras y hemorragias intestinales, sino también de uso externo: la pulpa de zanahoria cruda, aplicada sobre una herida o quemadura, beneficia a la piel y evita la formación de arrugas.
Se puede consumir cruda, y además de tener un excelente sabor, ayuda a fortalecer los dientes y encías. La zanahoria cruda se recomienda muy especialmente a los niños; el hecho de que requiera mucha masticación, hace que los músculos correspondientes se retuercen, que los dientes se fortalezcan y limpien, y son una ayuda para el intestino.
Rallada en ensalada es fácil de preparar y a los niños les suele gustar. También se puede añadir a los batidos de frutas, aportándoles mayor valor vitamínico. Es muy saludable también comerla cocida, en concreto en puré para las diarreas, pero pierde parte de su valor nutricional. Un puré de zanahorias preparado con una patata, unos trozos de cebolla, y zanahorias, es fácil de digerir y de rápida preparación. Las zanahorias cocidas también son una excelente guarnición para la carne o el pescado. Su color da viveza a los platos y colabora en su atractivo para hacer más apetitosa una comida.
Debido a las sustancias aromáticas que posee la zanahoria, es muy buena para estimular el apetito y para la gente que padece anemia. Útil también para eliminar cólicos y gases que emite el organismo, debido a ello es recomendable ingerirla después de las comidas. Ayuda a además a quienes padecen de estreñimiento y tienen dolor de estómago a causa de una intoxicación, en esos casos se pueden tomar seis zanahorias ralladas, distribuyendo la ingesta a lo largo del día. Este vegetal incluye propiedades diuréticas y ayuda a la desintegración de los cálculos renales. Es rica es fósforo, esto la convierte en un excelente vigorizante, muy útil para el cansancio mental. Tiene además propiedades naturales para mejorar la vista, un gran protector de la piel, y ayudar a la secreción de leche materna.
