¿Tu bebé llora demasiado?

bb1Por supuesto que todos los bebés lloran, no solamente cuando hay que cambiarles el pañal o cuando tienen hambre, pero si llora durante más de tres horas al día sin razón que puedas identificar, entonces es que tal vez tu hijo sea un llorón y para ello existe una regla de tres que dice que si los niños lloran durante tres semanas seguidas, más de tres días a la semana y durante más de tres horas cada día, se les denomina como unos “llorones”.

¿Cuáles son los síntomas?

Además de las más de tres horas al día que se tire llorando el bebé, existen otros detalles que les puede definir como llorones como que cueste mucho calmarles y tener un humor muy inestable pasando de estar muy tranquilos a totalmente irritados en apenas un momento. También padecen calambres a menudo por el cuerpo mientras están llorando, llegando a encorvar la espalda, enrojeciéndoseles las cara y deteniéndoseles la respiración muy brevemente.

Causas por las que el bebé llora demasiado

Las causas no están muy claras, pero si se ha tenido depresión, estrés o problemas durante el embarazo, pueden discutirse como causas posibles. Si el bebé llora excesivamente lo primero que hay que hacer es descartar que tenga cualquier lesión interna o enfermedad. También hay que determinar si el niño no está en una fase de crecimiento ya que durante estas fases lloran todavía más.

 ¿Qué se puede hacer si el bebé llora en exceso?

Normalmente la voz de la madre suele tener un efecto calmante sobre él por lo que se debe hablar o cantar algo durante un poquito en voz baja para que se tranquilice. Para evitar que se estrese, se debe exponer al bebé solamente a unos pocos estímulos. Si sufre fatiga puedes combatirla reestructurando su rutina, organizando mejor sus fases de sueño y las que está despierto.

Puede que también grite y llore porque tenga gases y estos le provoquen malestar. Para solucionar este problema se le debe realizar un masaje en la tripita o colocarle una compresa caliente en el vientre. Los movimientos de balanceo rítmico también pueden ayudarle a que descanse ya sea de pie o en su cuna. Si ninguna medida ayuda, es aconsejable acudir al pediatra o a una clínica para comentar la situación y que pueda ayudar a poner remedio.

Cómo se debe actuar

Lógicamente a cada bebé le funciona mejor una cosa que otra así que lo mejor es observar atentamente la reacción de tu pequeño para saber cómo tienes que actuar.

En cualquier caso las pautas que puedes seguir en principio son colocarle en posición de “seguridad”, es decir, tumbado de lado hasta que se haya recuperado del todo.

Si durante el berrinche el bebé pierde la consciencia, es muy importante colocarle en esta posición y si la pierde con bastante frecuencia, no dudes en acudir al pediatra cuanto antes.

Una de las cosas que probablemente más se han oído sobre cómo actuar en caso de un ataque de llanto fuerte, es soplarle la cara, sacudirlo o salpicarle con un poco de agua, pero esto no resulta nada aconsejable.