Los hijos son lo mas importante para los padres pero ellos deben entender que en algún momento de la vida ellos parte y forman su propia vida, es entonces cuando se sienten solos y sin motivación. 
Este síndrome tiene que ver con la ausencia de los hijos en el hogar cuando ya se independizan y deciden hacer su propia vida, entonces los padres sienten que la palabra hogar ya no tiene sentido y solo se ven en una casa pero sin razón.Este tipo de situaciones hace que los padres vivan con angustia, estén estresados peleando a sus hijos o molestos porque ya no comparten con ellos como cuando eran niños que salían al parque, de compras, los fines de semana estaban juntos todo el día, todas las noches siempre dormían en casa o veían televisión compartiendo opiniones.
Pero ahora los hijos trabajan, tienen pareja, hijos, amigos, quieren ir de paseos solos o salir a una fiesta, ya no ven la necesidad de ir a un parque con excepción de ir a practicar un deporte con otras personas de su misma edad. Las mentalidades son diferentes, cada quien cambia y empieza a tener mundos muy separados, con gustos diferentes, con visiones separadas.Para las mamas es tal vez mas difícil porque son quienes generalmente crían a los niños, los cuidan durante el día y más si no trabajan entonces la dedicación es total para el hogar, mientras que el padre se enfoca en su trabajo y sacar a su familia adelante. Entonces aspiran que sus hijos les duren para siempre y como toda mama siempre los verán como los bebes de la casa.
Por parte de los hijos hay que tener paciencia porque ellas se comportaran irritables y harán lo posible para lograr lo que quieren pero es sabido que reflejaran emociones de tristeza y de perdida y por supuesto tendrán que vivir una etapa de duelo. Una solución puede ser la de compartir ciertos momentos con ellos para que no piensen que los están abandonando o que pasaron a un segundo plano por la edad. Un almuerzo un sábado o un viaje un fin de semana puede ser una alternativa y las llamadas para contarles como están es recomendable.Pero esto también puede verse como una oportunidad para reavivar el amor de pareja que por cauda se la crianza, el trabajo, la falta de tiempo y otras ocupaciones, se fue desvaneciendo y parece como dormido.
Entonces en medio de la privacidad y la soledad, la compañía del uno al otro es la mejor medicina a la falta de los hijos. Habrá espacios para compartir, para el dialogo, momentos de pareja que poco a poco envejecen y de esos sueños que van cumpliendo y que tuvieron cuando eran jóvenes.Y por ultimo hay que verlo de una manera algo fuerte pero real, algo como una liberación porque los hijos siempre representaban algo que no permitía hacer ciertas actividades y ahora que ya crecieron y tomaron su vida, se puede aprovechar el tiempo para hacer lo que se olvido o dejo de lado en muchos años.
