Hay ciertos valores y comportamientos que se están perdiendo en la sociedad pero pueden ser el regalo más grande que pueden dar los padres a los hijos y que no tiene que ser de tipo material. 
Siempre la gente se mentaliza que los regalos deben ser de tipo material, costosos o que sean total mente palpables. Pero hay que tener claro que no siempre esos regalos que pueden costar una gran fortuna o tal vez unos pocos pesos no llenan a un ser o no son precisamente la felicidad de quien lo da. Estos regalos son de tipo más emocional, que pueden motivar, enamorar, ayudar a salir de una depresión o simplemente mejorara las relaciones entre las personas. Son regalos que puede dar desde el más pequeño hasta el más viejo y que no cuesta nada solo voluntad.
El primero es el regalo de la escucha, de estar atento a quien expresa su opinión o cuenta el más profundo de sus sentimientos o sus secretos pues eso demuestra que la confianza que se deposita es muy grande. Siempre hay que valorar cada palabra sin interrumpir, bostezar o criticar porque cualquiera denotara falta de interés, pereza o desilusionara porque en vez de una ayuda la persona se sentirá más atacada. El segundo es el cariño, la capacidad de dar amor sin esperar nada a cambio, la voluntad de tratar bien a los demás y ser generoso con besos y abrazos sin que se tenga miedo a que lo cataloguen de empalagoso porque no es excesivo sino se ofrece cuando es necesario. Incluso dar la mano o dar ciertos toques en la espalda producen algunas emociones que hacen sentir bien a los demás. Principalmente debe ser otorgado a la familia y a los amigos que están constantemente a lo largo de la vida.
En tercer lugar, la sonrisa es algo muy emocionante porque hasta dicen que por medio de ella se puede lograr a enamorar a alguien. Es bueno dar diariamente este regalo a los demás y entender que así se pasen por diversas dificultades, una sonrisa es el mejor regalo para sí mismo, para elevar el ánimo y para sentirse más relajado. Una nota escrita puede alimentar la alegría de alguien, es sentirse importante cada vez que se lee, es expresar sentimientos en un papel, desde un gracias hasta un te amo y saber que así sea un detalle simple, los pensamientos pueden hacer nacer detalles muy dulces. No tiene que ser de muchas páginas, sino una pequeña frase que refleje alguna emoción.
Un cumplido es mucho más importante, porque por medio de las palabras se puede evidenciar la sinceridad de las palabras y se puede observar el rostro de quien lo dice, además puede ser mucho más reconfortante en momentos difíciles y no tienen que ser solo referidos a la belleza sino también para exaltar una capacidad ya sea laboral, académica o con respecto a la forma de ser de alguien. Ayudar a los demás es un regalo doble pues se beneficia quien lo hace y quien lo recibe, lo importante es realizarlo con voluntad y aprecio, sin interés o mala gana. Por último, se encuentra el regalo del respeto, de un buen saludo o un hasta luego, de un gracias o un denada. Estos aspectos son buenos inculcarlos en los niños para que poco a poco se familiaricen con todos y cuando crezcan sean excelentes seres humanos.
