Primeros dientes del bebé

Los primeros dientes del bebé pueden generar una felicidad muy grande en los padres pero también preocupación por los síntomas que pueden experimentar. Y aunque hay métodos que no curan totalmente las sensaciones si pueden reducir las molestias. Primeros dientes del bebé En la mayoría de los bebés aparecen a los seis meses pero depende del organismo y desarrollo de cada uno para que se asomen antes o salgan después. Incluso pueden aparecer más allá después del año. Casi todos finalizan hacia los tres años de edad. Los primeros dientes en aparecer son los inferiores frontales y es muy emocionante para los padres cuando los bebés sonríen o hacen muecas y dejan ver los pequeños dientitos, esto sucede entre los 4 y 7 meses de edad. Pasadas 8 semanas aparecen los 4 dientes superiores frontales  y después de un mes seguirán apareciendo el resto de los dientes como los incisivos y las muelas. 

Generalmente los niños tienen sus 20 dientes de leche antes de los 3 años o justo a esa edad.  Esta etapa es preocupante para muchos padres pues con el nacimiento de cada pieza dental de presentan ciertos síntomas que alteran el estado emocional de los bebés y también ciertos estados físicos, por ejemplo, hay fiebre, diarrea, dolor, inflamación de las encías y por consiguiente irritabilidad. Por eso es que frecuentemente los niños buscan cualquier cosa para meterse a la boca y calmar en cierta parte la molestia que sufren, entre estas, las manos, juguetes, ropa, etc. Hay ciertos juguetes en el mercado que reducen este tipo de dolores y los pediatras recomiendan los que son de caucho y en su interior tienen agua. Es bueno tenerlos por un tiempo en el congelador para que el frio ayude a desinflamar. 

Los primeros dientes no permiten consumir al niño alimentos de consistencia un poco dura o de grandes tamaños porque aun no sabe hacerlo y es preciso una enseñanza y entrenamiento y no solo para masticar sino para poder pasar el bolo alimenticio. Hay casos pero son poco comunes en los que los bebes nacen con dientes o su erupción de genera hacia la primera semana de vida. No es preocupante con excepción de que alteren la alimentación o estén flojitos y el bebé pueda tragarlos. Existen ciertas recomendaciones que pueden ayudar a minimizar las sensaciones incomodas en los pequeños:

– Limpiar el rostro del bebé con un pañito suave para eliminar saliva y evitar irritaciones
– Brindar un objeto seguro para morder y que sea desinfectado una vez toque el piso o este muy usado. Debe ser lo suficientemente grande para que no se lo trague ni se atore y también que no libere motas, polvo u otras partículas que le causen daño. 
– Frotar las encías del bebe con las manos limpias, pero suavemente. 
– Cuando la irritación es incontrolable una visita al pediatra puede funcionar y generalmente recetan acetaminofen para niños que además de saber rico controla el dolor. 

Una vez aparecen los dientes es importante cuidarlos y tener una excelente higiene, y aunque estos son temporales o llamados de “leche” también pueden generar caries  e infecciones para los que vienen después, además que es bueno que los hábitos de limpieza se tengan en cuenta desde corta edad.