Las pautas de una buena alimentación

Una buena alimentación es de suma importancia en cualquier etapa de la vida pero sobre todo en los niños ya que es la base de un crecimiento saludable. Siendo importante enseñar al niño desde pequeño determinadas pautas como son el comer de todo y siempre sentado a la mesa. Las pautas de una buena alimentación

El niño que se acostumbra desde bebé a estas pautas no tendrá problemas a la hora de la comida, pero también será necesario adaptar la dieta diaria a la edad y necesidades del niño, teniendo en cuenta que tanto la cantidad como el tipo de alimentos que se le ofrezcan deberán ser adecuados.

Un mal hábito, por parte de muchos padres,  es servir demasiados alimentos en el plato o utilizar productos picantes o exóticos que el niño no conoce y pueden resultarles desagradables sobre todo cuando son aún pequeños. 

Asimismo, la comida no debe jamás utilizarse como premio o castigo de alguna acción, ya que si el pequeño advierte que esto es muy importante para los padres lo utilizará contra ellos como un manejo.

Tampoco dará buenos resultados utilizar diferentes distracciones para lograr que coma, evitar entonces la televisión, juegos y otras cosas que llamen su atención, sino que debe entender que es necesario que coma como algo fundamental para vivir.

Es recomendable establecer rutinas para la comida ya que los niños responden mejor cuando conocen anticipadamente los horarios, siendo importante además utilizar el mismo lugar y por sobre todas las cosas sentados a la mesa y con un horario establecido.

El niño debe comer junto al resto de la familia, no hacerlo comer aislado, ya desde el año debe estar sentado a la mesa con el resto de los integrantes de la casa y si es posible comer la misma comida.

También a partir del año de edad el niño ya debe comenzar a comer solo, utilizando los cubiertos y llegando a los dos años lo hará solo y sin ninguna ayuda.

Para que el niño tenga apetito cuando llega la hora de comer, es necesario que pase  tiempo suficiente entre una comida y otra.

Cuando el bebé pasa a la alimentación sólida este cambio debe hacerse de forma gradual con alimentos que le resulten sencillos de comer y masticar y posteriormente cuando ya le sea sencillo masticar se irán agregando alimentos como carnes (siempre cortadas bien pequeñas) bocadillos, frutas en trozos, etc.

Existirán alimentos que no serán de su gusto y en ese caso no debe obligarse al niño a comerlos pudiendo ser sustituidos por otro similar, pero jamás deben eliminarse de la dieta grupos enteros de alimentos ya sean frutas, verduras, carnes o pescados. Siendo posible también realizar algunos alimentos enmascarando su sabor con alguna salsa para que el pequeño lo coma.

Respetar las cinco comidas diarias y si el niño tiene hambre puede comer alguna fruta o un yogur.

Fomentar en los niños buenos hábitos alimenticios desde pequeños es una excelente forma de educarlos para que sean también adultos saludables, existiendo además muchas actividades que fomentan la dieta saludable ya sea a través de cuentos, obras teatrales y canciones, que además de divertirlos les sirvan de aprendizaje.

Foto Vía:Healthmad