Falsos mitos

Muchas son las creencias y mitos que se han extendido a lo largo de los años entre la población mundial, aunque la mayoría de ellas son inciertas y cuentan con una explicación lógica y científica. Falsos mitos Falsas creencias sobre el pan y la leche

Una de las creencias más extendidas en nuestra sociedad es la de que el pan engorda. Hablando de una manera estricta, todo alimento engorda porque va a aportar energía a nuestro organismo, pero justamente el pan es uno de los alimentos que no se va a almacenar en forma de grasa, sino en forma de depósito de glucógeno, que es indispensable para nuestra energía diaria.

¿Quién no ha oído alguna vez el dicho famoso: «encima de la leche nada eches»?. Pues bien, este refrán no tiene justificación alguna ya que la causa por la que se puede cortar la leche por tomar tras ella un zumo o una fruta, no es de tipo microbiano, sino meramente física.

Alimentos incompatibles y ejercicio

Algunas dietas son partidarias de no mezclar hidratos de carbono con proteínas o por prohibir tomar fruta y leche a la vez, pero en realidad no hay ninguna incompatibilidad entre alimentos. Separar los nutrientes de las diferentes comidas, es algo imposible ya que casi la totalidad de alimentos están compuestos de hidratos, de proteínas y de lípidos, cada uno en mayores o menores proporciones pero todos ellos mezclados.

Aunque pueda parecer que al hacer ejercicio el cuerpo se queda más bajo de energía y por tanto demanda con más intensidad una señal de hambre, en realidad es que las calorías que se queman durante y después de un entrenamiento físico son mayores que las calorías de los alimentos.

Otra de las creencias más extendidas es la de que leer con una luz débil daña los ojos posiblemente porque al leer con unas malas condiciones de luz puede darnos la sensación de que cuesta enfocar las letras cuando en realidad es porque los ojos se fatigan más de lo normal lo que puede acarrear la aparición de pequeñas molestias como dolores de cabeza o visión borrosa.