El origen del portal de Belén

El Portal de Belén también conocido como Pesebre o Nacimiento es la representación del nacimiento del niño Jesús y la posterior visita de los Reyes Magos. Pero
¿sabemos de donde proviene la costumbre de colocarlo cada año en nuestras casas? El origen del portal de Belén Procedencia del portal de Belén

Aunque en los últimos años la colocación del Portal de Navidad para celebrar el nacimiento de Jesús se ha visto un poco desplazada por el árbol de Navidad y los adornos de Papá Noel, es habitual encontrarse en todos los hogares un Belén ya sea de madera, papel, arcilla o cerámica, decorado de las formas más originales que se puedan imaginar.

No se sabe con seguridad de donde viene esta costumbre pero según distintas fuentes, la primera representación del Belén vino de mano de San Francisco de Asís a principios del siglo XIII d.C. en Italia. Este santo se dice que construyó un portal con madera y paja, con mula y buey incluidos, donde participaron los vecinos de la localidad italiana de Greccio, para representar algunas de las escenas relacionadas con el nacimiento del Mesías. Según cuenta la leyenda, mientras sonaban cánticos en honor a este misterio, la figura moldeada por San Francisco que hacía las veces del niño, extendió sus brazos hacia el Santo.

Antes de esta celebración existen precedentes de esta representación, ya que se han encontrado restos de belenes en catacumbas romanas y en otros lugares de culto cristiano. Pero en España esta tradición llegó de la mano de Carlos III de Borbón cuando al ser convertido en rey de España, promovió esta costumbre entre la aristocracia española pasando más tarde, a convertirse en algo popular.

Decoración del Portal de Belén

Muchas son las esculturas, pinturas y tallas de madera que existen desde hace muchos siglos, donde se representa la llegada al mundo de Jesucristo, pero aunque como hemos visto, no se sabe con certeza absoluta donde nació la costumbre de los portales, lo que es cierto, es que se ha convertido en una de las más bonitas de la época navideña.

Cada año padres, hijos, familiares y amigos buscan un lugar especial en el hogar para montar el Misterio de la Navidad, donde no pueden faltar las figuras principales: el niño Jesús, la Virgen María y San José, así como el buey y la mula, aunque cada vez es más normal encontrarse con un escenario completo donde contemplar la estrella de Navidad, los Reyes Magos, el castillo del rey Herodes, soldados romanos, lavanderas, animales, hogueras e incluso riachuelos o fuentes automáticas, sin olvidarnos de la iluminación que consigue que este decorado se convierta en el rincón preferido del hogar durante las fiestas navideñas.