Dislexia. Parte I.

En el estudio de la dislexia hay que diferenciar tres conceptos que se encuentran interrelacionados. El primero de ellos es el transtorno específico del aprendizaje de la lectura conocido propiamente con el nombre de dislexia mientras que el transtorno en el aprendizaje de la escritura es conocido como disgrafía o disortografía. Dislexia. Parte I. Definición de dislexia

Cuando se habla de dislexia se está haciendo referencia a cualquier transtorno en la adquisición de la lectura, aunque cada vez se está reduciendo el campo más hacia un síndrome con unas características específicas que son: la dificultad para la memorización y distinción de letras o de grupos de letras, la falta de orden y ritmo en la colocación de éstas o la mala estructuración de las frases, algo que se puede observar tanto en la lectura como en la escritura. Por tanto podemos decir que la dislexia es una perturbación concreta de ambas dejando intactas las demás funciones como la inteligencia, la imaginación o la memoria. Ejemplo de ello es que hay niños que tienen un nivel intelectual normal o incluso superior a la media y que se desenvuelven perfectamente en cualquier materia escolar pero que se encuentran con un problema a la hora de escribir o leer.

Tipos de dislexia

Se han diferenciado dos tipos de dislexia aunque normalmente aparecen juntas en un mismo niño. Una de ellas es la dislexia provocada po una confusión por proximidad espacial, caracterizada por confusiones o inversiones a la hora de escribir, torpeza motriz o una escritura defectuosa también conocida como disgrafía. La otra es la dislexia originada en una confusión por problemas de proximidad articulatoria donde es característica normal encontrarse con dificultades a la  hora de experesarse, la poca fluidez verbal, la dificultad para redactar, las inversiones y las dificultades con los números conocida como distografía.

Causas de la dislexia

Son diversas las teorías para intentar demostrar el origen de este transtorno y prácticamente se ha encontrado una causa en todas las áreas en las que se ha investigado como la psicológica, la pedagógica, la neurológica, etc. Una de ellas es la que achaca al cerebro un defecto funcional por no existir un equilibrio entre los dos hemisferios, predominando uno sobre otro. También se ha hablado de la herencia genética que localiza el problema en un gen concreto. Dificultades en el embarazo por problemas hormonales, la presencia de una lesión cerebral, inmadurez neurológica o algún transtorno psicomotor tanbién son algunas de las posibles causas que se barajan.

Factores de tipo psicopedagógicos como la carencia de especialistas en lectura-escritura, falta de experiencia del profesorado, utilización defectuosa de los métodos de aprendizaje o incluso un desentendimiento del niño que tiene problemas por parte del profesor son algunas de las posibles causas que influyen en el proceso de aprendizaje de la lectura y que dan lugar a la dislexia.