Diseño de bibliotecas para niños

Una excelente idea para motivar la lectura en los niños y decorar su habitación, es diseñar y fabricar una biblioteca que los divierta, que les parezca muy bonita y con la que puedan interactuar, mientras leen o dibujan. Diseño de bibliotecas para niños El habito de la lectura es difícil que sea apropiado por los niños y los padres debe ingeniarse diferentes maneras para que los libros les empiecen a llamar la atención. Lo bueno es que los libros cada vez son más llamativos, ilustrados y bonitos, lo que facilita esta actividad; pero también se pueden diseñar y fabricar determinados proyectos relacionados con mobiliario infantil, más exactamente bibliotecas infantiles. Se pueden ubicar en el cuarto de los niños para llenarlos de color y vida o se pueden posicionar en el estudio, para que ellos sientan que también comparten ciertos lugares en la casa con los adultos. Ideas hay muchas, pero pueden ser complementadas con mucha creatividad y ganas de que ese espacio dedicado a los niños quede muy lindo. 

1. Una biblioteca en la pared con diseño de ciudad, puede ser perfecta para los niños. En un fondo blanco, se pueden pegar adhesivos o pintar formas y figuras de edificios y autopistas. Al lado, es posible poner un cubo blanco, fijado con tornillos, como si fuera una repisa y encima de ella, ubicar autos y choches de diferentes tamaños y colores, para que contraste con el blanco de la pared y el negro del adhesivo. 

2. El eco diseño es una de las tendencias que se manejan actualmente y que mejor que  adaptarla en el diseño de la biblioteca infantil, generando así mismo, una conciencia en los niños, por el cuidado del medio ambiente y el reciclaje o reutilización de algunas materias primas. Es simple hacerlo, y basta con conseguir tres o cuatro cajas de frutas de madera y hacerles un tratamiento de perfeccionamiento, es decir, limpiarlos, lijarlos y pintarlos de colores vivos, como verde, azul, rojo, amarillo, etc. Una vez que están listos, se giran todos dejando los huecos hacia el frente y se ponen unos encima de otros, como una especie de edificio. Justo en los espacios, es donde se ponen los libros, los cuentos o cuadernos de dibujo. 

3. Hay algunas habitaciones que son muy pequeñas, pero no quiere decir que sea impedimento para tener una mini biblioteca. Para lograrlo, se toma un cajón mediano, se le adicionan unas ruedas y es fácil moverlo por toda la habitación y al lugar que se desee, incluso para hacer el aseo en la habitación será mucho más fácil. 

4. Otra de las formas más sencillas y rápidas para decorar una habitación infantil, es con el uso de repisas normales pero adicionándoles laterales para hacer una especie de cajón. Se pueden poner uno encima de otro como si fuese una escalera de madera o uno detrás de otro, como si fuese un tren. Todo depende de la creatividad de cada padre y también de la participación de los niños, para que opinen y ayuden a pintar y a ubicar sus libros en su nieva librería.