La diabetes, el asma o la hipertensión son patologías que pueden llegar a condicionar un embarazo pero que en cualquier caso son una planificación adecuada y con el consejo del médico, puede llegarse a buen término sin ningún tipo de problema. 
La hipertensión arterial
Una mujer se considera que es hipertensa cuando su tensión arterial se encuentra por encima de 140/90 de una manera constante. El principal riesgo que puede sufrir una mujer que es hipertensa durante su embarazo es la aparición de la preeclampsia, complicación que se encuentra asociada con problemas renales y con la tensión alta y que suele manifestarse a partir de la semana veinte de la gestación.
Su gravedad puede llegar a condicionar el parto. Si es leve y puede controlarse con fármacos y si no existe afección renal y el feto se encuentra bien, se intentará llegar hasta la semana número treinta y cuatro del embarazo. Pero si es grave y pone en peligro la vida del feto o de la madre, habrá que poner fin al embarazo a través de una cesárea.
La diabetes
La diabetes de tipo I es normal que se diagnostique durante la niñez o la adolescencia. Aparece al existir un problema en el páncreas que es el órgano que se encarga de fabricar la insulina para que los niveles de azúcar en la sangre sean los adecuados. Las mujeres que son diabéticas tienen que inyectarse insulina a diario así como controlar su dieta y el embarazo va a suponer un cambio en su metabolismo por lo que tendrán que adaptarse a unas nuevas pautas de insulina y a un régimen diferente.
El asma
El asma es una de las enfermedades que pueden controlarse mejor durante la gestación gracias a los fármacos. Es más, recomendación principal para una mujer que sufre asma y que está embarazada, es que no suspenda su tratamiento, ya que si se hace las consecuencias pueden llegar a ser peores que la medicación en sí misma. Y es que una crisis de asma puede dar lugar a una bajada de oxígeno en la sangre o hipoxemia y afectar al feto, lo que requeriría una atención médica urgente. Por eso en el momento en que una mujer asmática se entere de su embarazo, deberá acudir cuanto antes a su neumólogo o alergólogo para que le aconseje de los pasos a seguir y que le controlará su enfermedad sin ningún problema.
Enfermedad inflamatoria intestinal
Esta enfermedad engloba dos patologías básicamente: la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. Ambas enfermedades suelen aparecer durante la adolescencia y producen inflamación en el tubo digestivo. Los síntomas son dolor abdominal, vómitos y diarrea. En algunos casos puede afectar a la zona perianal provocando lesiones en forma de fístulas. Igualmente lleva asociada una absorción pésima de los nutrientes lo que puede provocar una mala nutrición. Pero en cualquier caso todos estos inconvenientes pueden estar bajo control gracias a los medicamentos, siempre prescritos por el médico.
