Con la llegada de un bebé a casa, la hora de la comida adquiere un significado especial, máxime cuando va creciendo y abandona su principal fuente de consumo como es la leche tanto materna como artificial. Y es que la preocupación por darle lo mejor y lo que más le alimente, se convierte en el principal objetivo de cualquier mamá. Descubre algunos sencillos platos que te ayudarán a estar más tranquila. 
Arroz con zanahoria y pollo
Dependiendo de la edad de tu pequeño, este plato podrás ofrecérselo tanto entero como triturado y puedes comenzar a dárselo a partir de los 6 meses de edad aproximadamente, aunque eso sí, consulta siempre antes con tu pediatra.
Los ingredientes necesarios son:
· Cuatro zanahorias
· Medio calabacín
· Una cebolleta
· Media pechuga de pollo
· Un vaso de arroz
· Cuatro o cinco vasos de agua o caldo de pollo
· Un poco de aceite de oliva
Comienza picando el calabacín, la cebolleta y la zanahoria y rehoga todos estos ingredientes con un poco de aceite en una cazuela. Incorpora después la pechuga de pollo cortada en trozos pequeñitos y rehoga durante un par de minutos más. Pasado este tiempo añade el arroz y rehógalo igualmente. Incorpora por último el caldo de pollo y deja que cocine todo durante veinte minutos a fuego suave.
Si vas a optar por triturarlo porque tu hijo todavía es muy pequeño, hazlo con bastante caldo de pollo o de agua para que quede bien líquido y le resulte mucho más fácil de digerir.
Su primer potito de pescado
El pescado es una fuente de alimentación tan importante como puede ser un filete de ternera y se recomienda que los pequeños lo consuman unas cinco veces a la semana. Su introducción en la dieta de tu hijo va desde los nueve meses de edad hasta los diez meses, dependiendo de lo que tu pediatra te recomiende.
En cualquier caso cuando vayas a cocinar pescado para tu hijo ya sea al horno, al vapor o hervido y aunque hayas adquirido piezas que no lleven en teoría espinas, debes siempre revisarlos.
Los ingredientes necesarios son:
· Dos pescadillas
· Una cebolleta
· Dos zanahorias
· Una patata
Pela y trocea todas las verduras y ponlas a cocer junto con las pescadillas en agua hasta que todo esté bien cocido. Escurre las zanahorias, las patatas y la cebolla y ponlas en un vaso de batidora junto con una parte del agua de su cocción. Limpia muy bien las pescadillas con las manos bien limpias para eliminar cualquier resto de espina y tritura hasta conseguir una textura homogénea. Si le añades un poco de aceite de oliva, este primer potito de pescado resultará verdaderamente exquisito a tu bebé.
Puré de frutas para merendar
Para acostumbrar a tu bebé a que coma de todo, aun estando todavía en la fase de los purés, puedes optar por preparar este rico puré de plátano y de aguacate, que gracias a su suave textura, resulta perfecto para ellos.
Para ello tan sólo necesitas:
· Un plátano
· Medio aguacate
Pela el plátano y córtalo en trozos para colocarlo en un vaso de batidora junto con el medio aguacate, sin el hueso lógicamente y bien pelado. Tritura perfectamente y sirve.
Como ves esta es una manera súper sencilla de introducir a tu pequeño en el mundo de las frutas y que apenas te llevará tiempo, resultando además esta receta perfecta por todos los nutrientes que contienen ambas piezas de frutas.
