Descubriendo el sexo del bebé

Saber el sexo del bebé va más allá de un simple capricho, para los padres a veces el poder imaginar con más precisión a su hijo o hija es algo necesario, por ejemplo para escogerle el nombre, para decorar su cuarto, para comprarle ropa fuera de los colores amarillo o verde neutros, e inclusive, para identificar enfermedades congénitas que se dan con más o menos frecuencia en cierto sexo. Descubriendo el sexo del bebé Sin embargo, hay padres que no desean saber el sexo de su hijo y prefieren dejarlo como sorpresa para el día del nacimiento, o hasta está el caso en que el pequeño inquieto no deja ver sus partes en los ultrasonidos, lo que es muy frecuente; pero sea cual sea la situación, nunca faltarán aquellos que desean opinar sobre el posible género del bebé en el transcurso del embarazo.
La mayoría de las madres, aunque lo hayan decidido o se hagan la idea, intentan identificar el sexo de su bebé en camino. Para ello llevan a cabo teorías muy diversas, las cuales van desde interpretar los sueños, hasta preguntarle a la abuela por un truco casero. 
Aun cuando se hayan presentado coincidencias, cabe resaltar que la mayoría de las “teorías caseras” son consideradas mitos que han pasado de generación en generación, y pueden resultar en una agradable distracción o juego, pero nunca deben ser tomadas como algo serio. De hecho, no hay nada recomendado excepto la comprobación médica, que es la única práctica con un método efectivo para descubrir del sexo del bebé
Si se utilizan métodos no comprobados, la desilusión ante la equivocación puede ser muy fuerte, y hasta costosa, si es que se decora una habitación entera, se compran prendas de ropa, muebles, etc. 

Hay dos mitos que son los más escuchados sobre el sexo del bebé durante el embarazo:
El primer mito es acerca de la barriga de la madre, se dice que si ésta se torna puntiaguda en la zona baja: se trata de un niño, por el contrario si la barriga es alta y marcada: es una niña.
En el segundo mito se habla del sexo del bebé según los malestares de la madre, por ejemplo; si se tuvieron nauseas al principio se dice que seguramente es una niña, por el contrario la ausencia de estos implicará supuestamente un niño.  Si la madre luce radiante, aún más que antes del embarazo, se dice que el bebé será varón, pero si no se experimenta ningún cambio o la mujer se siente poco atractiva, la causante es una niña en el interior.Como estos mitos existen muchos más en torno al sexo del bebé, que implican números, coordenadas y hasta el comportamiento de la pareja. Pero la única salida real y efectiva hasta el momento, es la consulta médica y la verificación del sexo mediante un ultrasonido.